Los municipios con más de 20.000 habitantes tendrán que pagar su deuda con Diputación -que asciende a fecha de marzo de 2011 a 8,9 millones de euros-, pero no lo harán en este momento. Es la conclusión que se saca en claro tras la sesión plenaria celebrada en la mañana de ayer en el Palacio Provincial y que estuvo marcada por los discursos de precampaña y el cruce de acusaciones entre el vicepresidente de la institución, Javier Aureliano García, y la portavoz del Grupo Socialista, Esperanza Pérez Felices, y momentos delirantes al más puro Woody Allen con interferencias en los micrófonos cuando hablaban los socialistas que desaparecían cuando lo hacían los populares y que el presidente de la Diputación, Gabriel Amat, llegó a achacar al ordenador portátil del diputado de IU, Pablo Yakubiuk.

Entre tanta situación anómala (en la que no faltaron reminiscencias a la Guerra Civil), Amat desveló, tras votar en contra su grupo la moción que había presentado el PSOE para exigir que los grandes municipios (Almería, El Ejido, Adra, Níjar, Roquetas de Mar y Vícar) amortizasen sus deudas a través de unas órdenes de pago, que mantiene conversaciones con dichos municipios para establecer un plan de pagos "pero sin establecer un calendario de abonos, ya que éste podría llevar a la asfixia a los ayuntamientos", matizó.

Además, Amat puntuazlió que su municipio, Roquetas de Mar del que es alcalde, "no debe nada a la Diputación ni antes ni ahora" a lo que Javier Aureliano García añadió que los 8,9 millones de euros no era una "cantidad real" ya que a principios de septiembre cifró la citada deuda en 6,2 millones.

El presidente ahondó más en el tema que centró gran parte del debate, y señaló que "lo primero que tienen que hacer es pagar las nóminas, y muchos lo hacen gracias a los adelantos de la Diputación" y abogó por "buscar fórmulas para liquidar la deuda que no han sido ustedes capaces de arreglar en cuatro años de gobierno", recriminó.

El vicepresidente también instó a Pérez, a que antes de solicitar a los ayuntamientos que devuelvan el dinero para ayudar a los pueblos más pequeños pidiera "con la misma vehemencia a la Junta de Andalucía la deuda de 13 millones de euros que tiene con la Diputación".

García señaló a su vez que la deuda "no va a solucionar la situación de quiebra técnica de la Diputación" y lamentó que "las facturas escondidas en los cajones que sus compañeros se han gastado en chuletones, gambas y buenos vinos entre otras cosas ya van ya por los cuatro millones de euros".