Una provincia rota por la muerte del 'pescaíto'

Almería llora la muerte de Gabriel y las administraciones públicas se volcaron ayer con los familiares al conocerse el trágico hallazgo del cuerpo sin vida del menor. Tanto el presidente del Gobierno como la presidenta de la Junta, Mariano Rajoy y Susana Díaz, se pusieron en contacto con los padres justo después de ser informados por el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, del desenlace fatal. Sobre el terreno, en el puesto de mando desde el que se coordina la labor de búsqueda, estaba la delegada de la Junta, Gracia Fernández, que relató el profundo dolor entre los integrantes del amplio dispositivo formado por 1.487 profesionales y más de 2.500 voluntarios. "Es una situación horrible. No queríamos de ninguna de las maneras este resultado y están todos deshechos porque mantenían la ilusión de encontrar al chico vivo".

Pese a lo que definió como "palo muy fuerte", la portavoz de la Junta puso en valor el esfuerzo de cientos de personas que voluntariamente se sumaron por tierra, mar y aire a la búsqueda de Gabriel. "Esa solidaridad nos tiene que hacer sentir orgullosos", añadió. En este misma línea se pronunció ayer el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, quien se había desplazado ayer a Las Negras para supervisar el operativo en su jornada trece. "Hoy hemos querido estar con la familia y mostrarle nuestro cariño y la cercanía con la provincia de Almería que está enormemente impactada". También agradeció el esfuerzo de los profesionales que han trabajado sobre el terreno con especial protagonismo de la labor de la Guardia Civil por esclarecer el presunto crimen.

La Diputación ha decretado tres días de luto y ha convocado para hoy un pleno extraordinario para trasladar de forma oficial el pésame a la familia y cinco minutos de silencio. También hay convocatorias en otros municipios de toda la geografía provincial como Vícar, El Ejido, Garrucha, Benahadux, Cantoria y Cuevas, entre otros, tras el que tuvo lugar ayer en la capital. Las instituciones locales almerienses lucen un crespón negro y las banderas ondean a media asta. También la Universidad de Almería ha convocado cinco minutos de silencio para el mediodía de hoy frente al auditorio del campus.

El Obispado de Almería trasladó ayer su "hondo dolor" por la muerte del menor y subrayó que "las desapariciones y asesinatos que nos sobrecogen día a día ponen de manifiesto la enfermedad del corazón humano, necesitado de conversión y perdón". La muerte del 'pescaíto' ha sumido a la provincia en un inmenso dolor.