El Edén de Verissa Wissel en grandes obras de metacrilato

Un atardecer en el desierto, la aurora boreal , los vientos del sur y el mar son algunos de los paisajes y momentos que se convierten en inspiración para Verissa Wissel. Un día en el paraíso es el nombre que recibe la exposición que fue inaugurada ayer en el Centro de Arte Museo de Almería (CAMA) donde la provincia se ha convertido en protagonista por formar parte de la nueva obra de la pintora alemana, afincada en Almería.

La creatividad de la pintora alemana se impregnó en cada pared del Museo con sus cuadros y en la entrada un ángel era el encargado de repartir manzanas para evocar el paraíso.

El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Almería, Ramón Fernández Pacheco, fue el encargado de presentar a Verissa Wissel: "Es la segunda exposición de la temporada de primavera en el CAMA. Es una obra muy diferente a todo lo que ha venido a este Centro de Arte. Es una técnica innovadora, digital".

El concejal describió las impresiones que les suscitaba la obra de la pintora: "Se trata de una pintura que propone un viaje por el color, con ondulaciones, una explosión cromática que no deja indiferente a nadie".

Fernández Pacheco señaló que Verissa Wissel "es una gran anfitriona con una inauguración atípica y muy original. Es una emprendedora y una gran artista. Estamos orgullosos de que exponga aquí porque con esta obra ganan todos los almerienses".

La alemana agradeció la presencia de la gran cantidad de gente que acudió a la inauguración. Incluso una amiga y su hermana, Billy Euler, viajaron desde Alemania para apoyar a la pintora. También se podía ver a algunas personalidades de la sociedad almeriense como el fotógrafo Carlos Pérez Siquier y el subdelegado del Gobierno, Andrés García Lorca, entre otros.

La exposición estará hasta el próximo 31 de mayo y la artista explicó que "he imaginado un día en el paraíso, he explorado mis fantasías. He plasmado mi visión, no sé si lo he logrado o es así. Si queréis ver el paraíso pasear por la muestra".

La alemana enumeró a algunas personas determinantes para esta exposición: "Agradezco al alcalde, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador; al director del CAMA, José Luis Bretones; a los montadores; a los trabajadores de Finca Ánfora; y al periodista Antonio Lao por ayudarme a dar mi primer paso en la pintura".

Wissel destacó el paisaje almeriense: "A cualquier pintor le cuesta plasmar el paraíso en un lienzo, pero yo he tenido la ventaja de que vivo en uno. Mis dos mundos, la pintura y el vino, no serían lo que son sin Almería. Es una tierra fantástica que me transmite muy buenas sensaciones". La alemana invitó a los asistentes a ver las obras y a tomar un aperitivo después: "Nadie será expulsado, aunque se coma una manzana".

Las obras están impresas en metacrilato: "Mi obra la he realizado pensando en las maravillas terrenales que nos rodean, pero le he incluido componentes bíblicos del jardín de El Edén. El arte digital es una rama muy joven, pero el ordenador es una máquina mágica. Utilizo un pincel virtual".