Educación deja a los colegios concertados sin portátiles

La decisión de la Junta de Andalucía de reducir el reparto de ordenadores portátiles que realizaba desde 2009 dentro del programa Escuela TIC 2.0 ha tenido dos perjudicados claros, los alumnos que no recibirán este curso su ordenador y los centros concertados, que pierden esta dotación. Y es que tal y como ha informado Educación, repartirá desde finales de mes o principios de noviembre 897 portátiles entre los alumnos de quinto de Primaria que estudien en colegios públicos, lo que equivale a un ordenador por cada tres alumnos.

Es la única alternativa que asegura la Junta, le ha quedado al departamento que dirige Mar Moreno después de que el Gobierno del PP dejara sin presupuesto el programa para dotar de portátiles a los chavales de quinto. Estos ordenadores no serán propiedad del alumno, sino del centro, de ahí que la Junta excluya a los colegios concertados. Tal y como han subrayado desde la Consejería, estos centros tienen la "obligación legal" de costearse su propio equipamiento.

Esta decisión no ha gustado nada a los centros concertados, que si bien entendían la supresión de la entrega de los ordenadores -de la que se viene hablando desde primeros de verano- para todos, no entienden ahora esa diferencia. Desde las Escuelas Católicas, han asegurado que no conocen oficialmente esa decisión todavía, si bien ha insistido en que "están en contra de todo lo que sea discriminatorio para los alumnos que estudian en un centro concertado ejerciendo su derecho constitucional de elección de centro". Por su parte, la Confederación Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos, Concapa, ya ha anunciado que recurrirán la decisión.

Mar Moreno ha insistido en que, después del recorte del Ministerio de Educación, era "imposible" que la Junta asumiera en solitario el coste total del programa. La estrechez presupuestaria ha obligado a priorizar políticas y la consejería ha preferido invertir en profesorado, mantener la ratio de alumno por aula y blindar las ayudas y becas a los más desfavorecidos. Finalmente destinará cinco millones de euros, a cargo del Presupuesto de 2012, para que los alumnos de quinto cuenten con un portátil, en vez de los 22 millones que se venía invirtiendo hasta ahora por parte del Ejecutivo central. La diferencia es que ahora los estudiantes de quinto no podrán llevarse en su mochila el ordenador a casa, salvo permiso del colegio. Los terminales se distribuirán en los 250 centros públicos de la provincia, donde estudian 6.106 alumnos de este curso.