Entra a husmear en un garaje ajeno y halla una mina anticarro
El artefacto, que se encontraba sin carga explosiva, estaba guardado en el altillo de un local cuya dueña está de mudanza
Una pieza de guerra que su dueña tenía "como de colección" y que fue regalada por un familiar que había sido militar, sembró el pánico el jueves por la noche en el barrio de Pescadería. Un ciudadano que pasaba por la zona y que vio el garaje abierto de par en par accedió al interior y localizó una mina anticarro y siete bengalas marítimas en un altillo. Sorprendido por el hallazgo y asustado, alertó a la Policía Nacional, que de inmediato activó el protocolo de actuación y movilizó al TEDAX.
Hasta el lugar se desplazaron efectivos de la Policía Nacional, de la Policía Local, Guardia Civil y Bomberos, que tras inspeccionar el garaje, cada uno en su ámbito de actuación, acordonaron la zona, desalojaron los alrededores e incluso las viviendas colindantes, cortaron el tráfico y manipularon los artefactos que después fueron trasladados a la Comisaría. La mina carecía de carga explosiva, por lo que no suponía ningún peligro para la población. Según han informado fuentes de la investigación, únicamente contenía en su interior una pequeña cantidad de carga fumígena, así como un indicador de la misma.
La Policía se centra ahora en averiguar la procedencia de las bengalas de señalización marítima que aparecieron en el garaje.
Los hechos ocurrieron sobre las 23:00 horas en la carretera que une la capital por el barrio de Pescadería con Aguadulce, cuya vía quedó cortada al tráfico durante más de una hora con una larga cola de coches e incluso protestas de los conductores ante la falta de previsión para indicar el corte de vía y desvío dirección al Poniente.
El hecho de que el garaje estuviera abierto es fruto de la mudanza en la que ya están inmersos los vecinos que habitan en el edificio. El Ayuntamiento ya les ha avisado de que será derribado la próxima semana y se apresuran a trasladar sus enseres.
La Comisaría informa de que la ley prohibe la tenencia o depósito de materiales explosivos en funcionamiento. Y advierte de que en caso de coleccionismo Defensa debe inutilizarlo.
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