La Escuela de Imagen y Sonido invade 'El Hormiguero' con un motín en el plató

Pedir un bocata a gritos, y hacerlo con un alumno de la Escuela de Imagen y Sonido de Almería como cabecilla, fue una de las funciones que les encargaron los profesionales de El Hormiguero a los jóvenes que cumplieron su función de forma perfecta.

El invitado del martes del programa de Cuatro fue Luis Tosar que está promocionando su película Celda 211 que se estrena el 6 de noviembre en cines de toda España. El nuevo escenario donde interpreta el actor gallego el film es una cárcel y se muestra una historia dura. El intérprete fue premiado como Mejor Actor en los Premios Goya de 2004 por Te doy mis ojos y Mejor Actor de Reparto en 2003 por Los lunes al sol. En 2006, participó en el remake de Corrupción en Miami. Parte de su currículum fue recordado por el presentador del show televisivo, Pablo Motos.

Los alumnos de la EISO estuvieron totalmente volcados con todo lo que se representó por el escenario de El Hormiguero. Antes de entrar al programa, como hicieron con los laboratorios de cine que vieron por la noche, se dividió el grupo en dos, para el martes y el miércoles. La llegada de los estudiantes del primer grupo a los estudios se representó con nervios, por algunos, y con ganas, por todos los que acudieron.

Momentos antes de entrar a plató, se procedió al papeleo habitual para los derechos de imagen y después se procedió a explicar al público todos los pasos que debían seguir dentro y algunos consejos.

Desde el primer momento, el público se convirtió en el gancho perfecto de gran parte de los números que se celebraron en el programa. Cada vez quedaba menos tiempo para finalizar la cuenta atrás, pero los asistentes tuvieron que sacar su papel de actor por un día. Comenzaron los primeros ensayos donde uno de los alumnos de la EISO se proclamó como la voz principal para pedir un bocadillo y el resto del público se encargó de acompañarle.

El minuto cero da comienzo a los primeros segundos del programa de Cuatro donde los asistentes se encargaron de aplaudir con todas sus energías y animar a los profesionales del humor.

Llegó uno de los momentos apoteósicos del programa del martes y los gritos se alzaban para pedir un bocata. Alguna sonrisa se escapó entre los miembros del público, pero quedó un resultado magnífico. Colaboradores y trabajadores del programa felicitaron al alumno de la EISO que hacía de protagonista principal en el sketch.

Otro de los momentos participativos de los alumnos de la Escuela de Imagen y Sonido fue cuando Jandro, colaborador habitual del programa, jugó con el público y los asistentes representando un desmayo fueron víctimas de las trastadas del humorista.

"Vete a dormir", con esa frase ya emblemática de El Hormiguero, los jóvenes se despidieron de una noche cargada de emociones, buen rollo y mucha participación. Muchos de ellos, tras salir de los estudios, aseguraron que querían "repetir" y no dudan en querer adentrarse una vez más en un hormiguero lleno de humor.