Esquivan al Ayuntamiento para conseguir una plaza de garaje

Aparcar en el centro de Almería se ha convertido en una práctica cada vez más imposible. Tanto es así que según una encuesta elaborada por la empresa SocietaEstudios, el aparcamiento es el segundo de los principales problemas para los ciudadanos de la capital.

La desesperación que genera estar incluso 20 minutos dando vueltas por las calles o hacer un desembolso diario extra en los aparcamientos públicos lleva a muchos ciudadanos a la compra o alquiler ilegal de plazas de garaje en alguno de los parkings con los que el Ayuntamiento cuenta en el centro de la ciudad.

San Pedro, Obispo Orberá, La Rambla, López Falcón, Hermanos Machado o Derechos Humanos, son los subterráneos que cuentan con plazas de aparcamiento para residentes y trabajadores cuya venta o alquiler quedan terminantemente prohibidos sin la autorización del Consistorio. Y es que los adjudicatarios de estos aparcamientos cuentan con una concesión por parte del Ayuntamiento, en la mayoría de los casos de 60 años, por la que abonaron en su día entre los 14.000 y los 16.000 euros tras ser rescatados de un listado de solicitantes. Un requisito para concurrir a una plaza de aparcamiento público es que hay que vivir en la zona donde este el garaje o trabajar en las inmediaciones.

En el caso de querer vender una de estas plazas, será el Ayuntamiento el intermediario y el que se encargue de determinar el precio de la misma. Existe actualmente una lista de espera en los diferentes parkings que se deberá de respetar. Pero hay algunos más impacientes que deciden saltarse todo este proceso y compran directamente a un particular sin conocer las repercusiones que esto puede tener.

De este modo, no existirían documentos que acrediten la posesión del aparcamiento, simplemente un documento privado que ante la ley es papel mojado. Además, ante esta situación la empresa privada que se encarga de la gestión de cada uno de los subterráneos, podrá prohibir la entrada al mismo a estas personas. Y esto ocurre tanto en la venta como en el alquiler. El concejal de Obras Públicas en el Ayuntamiento de Almería, Francisco Amizián, ha asegurado que en muchas ocasiones, la empresa gestora ha denegado la entrada a estas terceras personas.

Con todo esto, la única opción para hacerse con una plaza de aparcamiento en un parking público del centro de la ciudad es inscribirse en una lista de espera cuyo seguimiento realiza el Consistorio.

En el momento en el que una persona se disponga a vender, será la Administración Local la que fije el precio de venta para evitar la especulación inmobiliaria. En el caso de querer arrendar una plaza, cada parking dispone de unos abonos que oscilan entre los 170 euros para coches o los 40 euros para motos.

Entre los subterráneos citados anteriormente suman un total de 1.609 plazas para residentes y 1.647 para tráfico de rotación. Las que se alquilan mediante abonos son de rotación a excepción de algunas que se alquilan con reserva, cuyo precio es mayor y garantiza una plaza de garaje fija a diario.