Llegados desde otras provincias andaluzas, de Murcia, Melilla, Ceuta o Alicante, un centenar de feriantes, con presencia desde hace años en la Feria de Almería, se concentraba en el Plaza Vieja contra el sistema arbitrado por el Ayuntamiento de la capital para adjudicar, mediante subasta, los espacios a ocupar en el recinto ferial. Aseguran que no montarán los cacharricos en esta edición de las fiestas en honor a la Virgen del Mar, si el equipo de gobierno no recula.

Desde las nueve de la mañana hasta aproximadamente la una de la tarde, las pancartas han dejado claro que los feriantes se han rebelado ante la celebración de una nueva subasta, que les obliga a pujar en sobre cerrado por las parcelas del recinto sin tener en cuenta la antigüedad, con criterios “subjetivos” en una última fase de valoración y recaudando más dinero del que el sector asegura que puede soportar.

“Abajo la subasta” o “no a la destrucción de los puestos de trabajo” son algunos de los lemas que las diferentes asociaciones han desplegado en la Plaza Vieja en respaldo a los feriantes de Almería, que han protagonizado esta manifestación sin llegar a ser atendidos por el alcalde o miembros del equipo de gobierno, después de varias reuniones mantenidas semanas atrás en las que las partes no han conseguido cerrar un acuerdo que aúne intereses.

La subasta de parcelas es el sistema que, con el cambio de legislación, fue instaurado por el Ayuntamiento de Almería hace nueve años. Surgieron entonces las mismas quejas, y hubo de igual manera concentraciones, que se fueron disipando. Ha sido un tiempo de relativa tranquilidad –el sector ha tenido sus más y sus menos por el recorte de días o, el pasado año, por la coincidencia de fechas con la Feria de Málaga–, pero la crispación resurge porque el Ayuntamiento pone de nuevo el contador a cero.

Según han explicado los feriantes, desde 2011 ha habido dos subastas, respetando la última celebrada la antigüedad. “Hay muchos feriantes nuevos y nosotros nos podemos quedar fuera”, comenta José Antonio Sánchez, feriante de Sevilla que lleva doce años montado en Almería.

'Stop licitaciones', en el dorso de las camisetas de los feriantes

Al temor por quedar fuera del reparto de parcelas, se suma el gasto que les acarrea la subasta. Son 800.000 euros los que estos años atrás ha estado ingresando el Consistorio por la ocupación de suelo en el Real de la Feria, una cantidad excesiva en opinión de un sector que, desde la crisis económica y, por ende, con una menor presencia de visitantes a la Feria de la Noche, ha ido sosteniéndose. “Es demasiado dinero, no recaudamos tanto. Es que perdemos dinero”, lamenta José Benjamín López, presidente de la Asociación de Feriantes de Elche, quien dejó de montar en Almería “porque ya no me interesaba”. En la misma situación, Germán Martín, quien, después de diez años, explica que se vio obligado a descartar a Almería porque las cuentas no le salían.

En las últimas semanas se ha habido reuniones con el actual concejal de Cultura, Diego Cruz, en las que, según la Asociación de Feriantes de Almería, el sector le ha planteado al responsable municipal otros sistemas aplicados en el resto de las ciudades andaluzas ya que, afirman, que Almería es la única en España con sistema de subasta. En Sevilla, es la asociación de feriantes la que gestiona en colaboración con el Ayuntamiento las ubicaciones en el Real, pudiendo atender a ese criterio de antigüedad que defienden sin contravenir la normativa legal y, añaden, “sin que haya peleas”. Aunque cualquier base de un negocio es obtener ingresos suficientes como para que merezca la pena el esfuerzo, aseguran estar dispuestos a seguir pagando al Ayuntamiento esos 800.000 euros que recauda.

Mantienen su ánimo de negociación, estando inclinados a intercambiar una bajada de tasas por parte del Ayuntamiento por un menor precio en las fichas y hasta la celebración de un segundo Día del Niño con vistas de contribuir a aumentar el número de personas que acuden a la Feria de la Noche. “Salimos todos ganando”, consideran, si bien el concejal de Cultura aseguraba que estas propuestas no se han llegado a plantear ni son posibles.

La hoja de ruta de los feriantes pasa ahora por la plataforma jurídica con idea de recurrir el sistema de subasta, mientras que “valoran” no montar las atracciones esta Feria. “No es una amenaza, no estamos en contra de la Feria y de los almerienses, sino que nos vemos en esta situación por culpa del Ayuntamiento”, afirma Fernando Fernández desde la Asociación de Almería, descontenta por los titulares de prensa.