Hoy tengo el honor de entrevistar al director de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino y amigo mío. Juan Manuel Martín Robles conocido por todos como Juanma es de Berja y tanto en su pueblo como en la provincia es querido por su dedicación al arte. Juanma es director a su vez del Museo Casa Ibáñez de Olula del Río, del Museo de Arte de Almería – Espacio 2 y del Museo Doña Pakyta, también de la capital.  Nacido el 12/02/1975, este inquieto almeriense tiene una impresionante trayectoria tanto académica como profesional. Entre 1994 y 1998 estudió Historia del Arte en la Universidad de Granada. En 1998 comenzó el doctorado y en 2002 defendió sus tesis doctoral, dedicada a la figura del erudito granadino Francisco de Paula Valladar. Tras los estudios académicos realizó, al margen de numerosos cursos de especialización, dos másteres, uno en Museología y otro en Gestión Cultural del Patrimonio de la Iglesia. En 2005 Juanma inició su carrera profesional como gestor cultural y comisario de exposiciones en Granada, colaborando con instituciones como el Museo Casa de los Tiros de Granada o la Obra Social de CajaSur. En paralelo comenzó a trabajar, también en gestión cultural, en la empresa Arte&Cía de Granada. Entre 2008 y 2011 fue profesor de Historia del Arte en la Universidad de Jaén. Y desde el año 2012 está vinculado a la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino. Miembro del Instituto de Estudios Almerienses y del Centro Virgitano de Estudios Históricos, actualmente es Jefe del Área de Creación del Instituto de Estudios Almerienses. También es miembro de la Red de Museos y Estrategias Digitales REMED (Universitat Politécnica de Valencia) y de la Red de Expertos del Proyecto Campus de Excelencia Internacional en Patrimonio (Universidad de Jaén). Ha sido presidente del Vector de Cultura y Turismo Sostenible del Plan Estratégico Almería 2030 del Ayuntamiento de Almería, y miembro del equipo redactor del proyecto CAMINA, financiado por la Unión Europea. Desde el año 2005 ha comisariado y coordinado más de cien exposiciones temporales de artes plásticas y fotografía. Comenzó a investigar y participar en congresos en 1997. Sus primeras publicaciones en revistas especializadas de arte aparecen en el año 2000. Su primer libro lo publicó en 2007. De sus libros destacaría: Sonrisas de Granada. Un siglo de “monos” y humor diario: Historia del humor gráfico en Granada (2007), Andrés García Ibáñez y el arte contemporáneo almeriense (1971-2010). Biografía inacabada (2011), Antonio López. Obras del Museo Casa Ibáñez (2013), Pérez Siquier esencial (2014), Capuleto. Obra completa (2014), Federico Castellón. La colección del artista (2016), Rejería y arquitectura doméstica en Berja durante el siglo XIX. Signos de distinción urbana de una sociedad burguesa en auge (2016), 50 años de artes plásticas en Jaén. Creación, medios y espacios (1960-2010) (2016), La colección André y Man Collot. Una mirada al grabado francés contemporáneo (2017), Venecia en el imaginario artístico. Colección Vida Muñoz (2018), La persistencia de lo clásico (siglos XVIII-XXI) (2020) o Cuatro artistas naífs almerienses (2022). Referente a su vida personal, su infancia y primera juventud la vivió en Berja, donde cursó la EGB, el Bachillerato y el COU. “Fueron años divertidos, como la de la mayoría de los niños del pueblo, en los que participé en numerosas actividades deportivas y culturales, siempre me ha gustado estar activo”, afirma. Juanma tiene dos hermanas menores. Su padre, ya fallecido, tenía una empresa de pintura y decoración, su madre es ama de casa. Está casado, y aunque no tiene hijos, sí tiene una gata: Luli, que para ellos es una más de la familia. Sus principales aficiones son escuchar música y leer. También le gusta mucho pasear y disfrutar de un buen rato con su esposa y sus amigos. Juanma es una persona de enorme actividad, que se entrega al máximo en su trabajo, profesional, honesta, bonachona, apreciada por quienes le conocemos y muy comprometida con la cultura de la provincia.

R. G. F.: En 2010, antes de llegar a la dirección del Museo Ibáñez, ideaste un plan museológico para este espacio de arte olulense. ¿Podrías explicarme en qué consistió?

Juan Manuel: El Plan Museológico del Museo Casa Ibáñez fue mi primer trabajo profesional como museólogo. En este quedó recogida la historia del museo, se valoró su singularidad y se analizó su funcionamiento a todos los niveles, además se planteó cómo debía ser el futuro del museo, cómo podía mejorar su funcionamiento en todos sus niveles y cuál debía ser su acción a partir de ese momento. Después de este plan museológico he tenido la oportunidad de participar en el del extinto Museo Casa Ibáñez de Melilla y redactar el del futuro Museo del Realismo Español Contemporáneo.

R. G. F.: Háblame sobre cómo nació la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino (exfundación Museo Casa Ibáñez) y cuál es la misión de la misma.

Juan Manuel: La fundación se puso en marcha en 2005 para asegurar la apertura pública del Museo Casa Ibáñez de Olula del Río. En 2014, debido al gran crecimiento del proyecto cultural puesto en marcha y después de que la empresa Cosentino se incorporase a la fundación, cambió su denominación y amplió sus fines y misión para mirar más allá de los límites del Museo Casa Ibáñez, y poder vincularse a nivel nacional a cualquier iniciativa cultural o museística de especial interés para la fundación.

R. G. F.: ¿Cuál es la estructura organizativa de la fundación? ¿Cómo está configurado el Patronato y cuáles son sus funciones?

Juan Manuel: La fundación cuenta con dos órganos estructurales: el Patronato y la Dirección. Actualmente el Patronato está configurado por su presidente, Andrés García Ibáñez, y dos vocales, Santiago Alfonso (en representación de la empresa Cosentino) y Rita Casanova Pagán. Tanto el presidente como los vocales tienen como función principal asegurar económicamente la continuidad en el tiempo de la fundación para que ésta pueda desarrollar sus fines y asegurar la pervivencia del Museo Casa Ibáñez y todos los espacios culturales que alrededor de éste se han creado.

R. G. F.:¿Cuáles son las áreas básicas de trabajo en las que se centra la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino?

Juan Manuel: Actualmente la fundación centra su atención en gestionar los espacios museísticos de Olula del Río (trabajando tanto en su apertura al público, como en la puesta en marcha de proyectos, exposiciones y acciones culturales y sociales para disfrute de los usuarios de éstos); la labor investigadora y editorial vinculada al Centro Pérez Siquier para continuar dando visibilidad a la obra de Carlos Pérez Siquier; la puesta en valor del arte almeriense a través de exposiciones y publicaciones, en colaboración con la Diputación de Almería; y la dirección artística de las dos sedes del Museo de Arte de Almería: el Museo de Arte Doña Pakyta y el Espacio 2, colaborando con el Ayto. de Almería.

R. G. F.: ¿Cuál es su modelo de financiación? ¿Qué presupuesto tiene la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino para su gestión?

Juan Manuel: La fundación financia su actividad tanto a través de las aportaciones de los miembros de nuestro Patronato y las subvenciones que actualmente recibimos de la Diputación de Almería y la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, como a través de los servicios culturales que ofrecemos a terceros, como es el caso del contrato para la dotación y gestión artística del Museo de Arte de Almería.

Al margen del presupuesto de inversión, variable según las necesidades que se plantean anualmente, la fundación cuenta actualmente para el desarrollo de su labor cultural en todos los espacios que gestiona con un presupuesto de 375.000 euros.

R. G. F.:¿Cómo se gesta una gran exposición temporal en el Museo de Arte de Almería - Espacio 2, cuánto tiempo de preparación conlleva, qué presupuesto necesitas?

Juan Manuel: Lo primero es saber qué queremos exponer en cada momento, cual es la idea principal de la exposición. Una vez definido esto se inicia todo el proceso de comisariado y coordinación, labores que por lo general nos llevan entre un año y seis meses. Después llega la fase de diseño de la exposición, la definición de los elementos de comunicación y museografía que necesitamos, y por último el montaje de la muestra. El presupuesto que manejamos para cada exposición en Espacio 2 está entre los diez y los trece mil euros, a lo que habría que sumar el coste de la edición del catálogo, aproximadamente unos ocho o nueve mil euros más.

 R. G. F.: ¿Debes tener en cuenta criterios en número de visitantes a la hora de tu programación artística?

Juan Manuel: Claro, pero no porque me preocupen las cifras finales, sino por el carácter social que creo debe tener toda acción cultural. Estoy convencido que hay que “estirar” todo lo posible el presupuesto con el que contamos para poder llegar al máximo número de usuarios, buscar la máxima rentabilidad social posible, y esto sólo se puede hacer teniendo siempre en cuenta las necesidades y expectativas de la sociedad.

R. G. F.: Las pinacotecas de la fundación ofrecen al visitante unas excelentes colecciones permanentes, así como también exposiciones temporales de gran relevancia. ¿Qué otras actividades promueven para relacionarse con la sociedad?

Juan Manuel: Mantenemos una línea editorial en la que tienen cabida catálogos de exposiciones y estudios monográficos sobre los artistas que forman parte de nuestras colecciones permanentes,  desarrollamos distintas programaciones culturales y didácticas, tanto en el Museo de Arte de Almería, como en nuestras instalaciones de Olula del Río, donde recientemente hemos puesto en marcha el proyecto “Museos en Acción”, con talleres didácticos para familias, conciertos didácticos, cuenta-títeres, conciertos y acciones teatrales…, y nos involucramos con la sociedad almeriense, y en especial con la que vive en barrios más desfavorecidos, a través de acciones sociales como nuestra participación en el proyecto CAMINA.

R. G. F.:¿Y cómo utiliza la fundación y sus museos las redes sociales a la hora de acercar la cultura y el arte en particular a la ciudadanía?

Juan Manuel: Desde la fundación apostamos, desde el principio, por profesionalizar la gestión de nuestras redes sociales y que la persona responsable de éstas formase parte del propio proyecto para que nuestra interacción con la ciudadanía fuese lo más cercana posible sin perder su carácter cultural… Lo mejor sería que le preguntases a Elena Moreno Pascual, nuestra responsable de comunicación, cómo hace su particular "magia" en nuestras redes.

R. G. F.: La importancia del Centro Pérez Siquier de Olula del Río en el ámbito nacional y almeriense es incuestionable. ¿Qué reconocimiento crees que merece a nivel internacional? ¿Qué le hace tan especial y diferente de los otros museos dedicados a fotógrafos?

Juan Manuel: Poco a poco se va consolidando el prestigio del centro a todos los niveles, incluso en el internacional, algo en lo que es fundamental el propio reconocimiento de la obra de Carlos Pérez Siquier y la acción editorial que estamos desarrollando en torno a él. Pérez Siquier ha sido el primer fotógrafo español al que se le dedicó, hace ya cinco años, un espacio monográfico, algo que es su principal singularidad. También hace muy especial al centro su propia arquitectura y la forma de exponer la obra que se adoptó, algo en lo que fue fundamental la figura de Andrés García Ibáñez, diseñador tanto del espacio, como de la distribución de la colección que se expone.

R. G. F.: ¿Cómo era tu relación con Carlos Pérez Siquier? ¿Y cómo le recuerdas?

Juan Manuel: Mi relación con Carlos inició, como todas las que mantengo con artistas, como una relación profesional, pero con el paso de los años y el trabajo continuo con él se transformó en una relación personal, donde la admiración, el trabajo y el cariño se entremezclaban constantemente. En lo profesional lo recuerdo como una persona con un talante dialogante, siempre dispuesto a conversar y escuchar. En el ámbito más cercano lo recuerdo socarrón y con muy buen humor, siempre tenía una palabra amable.

R. G. F.: Háblame un poco en general sobre la colección permanente de fotografía española que se encuentra ocupando el espacio de algunas paredes del Centro Pérez Siquier.

Juan Manuel: Es una colección importantísima y en continuo crecimiento a través de la cual, al margen de la obra del propio Pérez Siquier, se puede hacer un recorrido por la historia de la fotografía española desde el siglo XIX hasta nuestros días, con presencia de algunos de los nombres más pujantes de la fotografía nacional. También tiene una presencia importante la fotografía vinculada a Almería, con una impresionante colección de fotografías del Grupo AFAL y una representación de destacados fotógrafos almerienses del último tercio del siglo XX hasta nuestros días.

R. G. F.:Si te pidiera que escogieras sólo tres pinturas del Museo Doña Pakyta de Almería, ¿con cuáles te quedarías y por qué?

Juan Manuel: ¡Qué difícil! Creo que con “Belén”, de Pedro Antonio; “Guerra y paz”, de Federico Castellón; y “Retrato de Villaespesa”, de Perceval, tres obras que representan, de una forma muy esencial, la carrera de tres de los artistas almerienses más importantes del siglo XX.

R. G. F.:Tu última exposición comisariada, "200 años de pintura almeriense", clausuró el pasado 18 de septiembre. ¿En qué otros proyectos de comisariado estás trabajando ahora mismo o cuáles tienes en mente pero todavía están en el aire?

Juan Manuel: Realmente lo que se clausuró el pasado 18 de septiembre fue la primera de las tres exposiciones que configuran el proyecto “200 años de pintura almeriense”. El próximo martes se inaugurará la segunda exposición, dedicada a los artistas activos entre 1940 y 1975, y tras ésta, aún en octubre, la última, en la que mostraremos obras de artistas que comenzaron a exponer a partir de 1980. Además de en estas dos exposiciones, también estoy trabajando en el comisariado de “Carlos Pérez Siquier. 91 disparos”, una exposición que tendrá lugar en el Museo de Arte de Almería – Espacio 2 a finales de noviembre, y en las dos exposiciones temporales con las que se inaugurarán las nuevas salas del Museo de Arte Doña Pakyta, una para el proyecto CAMINA, sobre la imagen de La Chanca, y otra que nos permitirá disfrutar de la colección de obras sobre papel del Museo Casa Ibáñez, con obras de Goya, Picasso, Dalí, Tapies, Saura, Clavé o Antonio López, entre otros muchos.

R. G. F.: Eres director de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino desde 2012. ¿Cuál es el balance profesional que haces de estos diez años al frente de la institución?

Juan Manuel: Para mí está siendo una experiencia muy positiva y enriquecedora. Gracias a la libertad que me concede el Patronato de la Fundación, he podido desarrollar el proyecto cultural, expositivo y social con el que siempre soñé. Un proyecto que pone el arte al servicio de la sociedad y que pone en el centro de sus objetivos a las personas, a los visitantes y usuarios de nuestros museos y espacios culturales, que son los que nos trasmiten que nuestra acción va por buen camino.

R. G. F.: Y para concluir con la entrevista: ¿cómo imaginas el futuro de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino?

Juan Manuel: Siempre al servicio de la cultura y la sociedad, continuando con la labor que ya estamos desarrollando en los espacios que ya gestionamos en Olula del Río y Almería capital, y vinculados a algunos de los nuevos e ilusionantes proyectos museísticos que están por llegar.