Iconografía religiosa Castillo Lastrucci (II)

AL concluir la Semana Santa, los distintos medios suelen efectuar resúmenes y análisis alrededor de los cortejos procesionales y de las cofradías que las posibilitan. Este año, en cambio, los comentarios han sido prácticamente testimoniales. Posiblemente porque organizadores, Prensa, público y hoteleros están de acuerdo: todo ha salido a la perfección, acorde con lo proyectado. Incluso la meteorología, a diferencia de pasadas ediciones, ha colaborado en su mayor esplendor. Debemos felicitar por tanto a sus artífices por la escenificación pasionista del ciclo festivo-religioso de Primavera. De domingo a viernes las hermandades han sacado a la calle a sus titulares (misterios, vírgenes, nazarenos y crucificados) en pasos de altísima calidad artística, tanto de las figuras como en la talla de sus canastillas (pese a que algunas aún están sin concluir).

Es cierto que por vicisitudes varias o por la secular pobreza de primitivas asociaciones pías, estamos huérfanos de grandes obras del Barroco andaluz. No obstante, la capital luce un espléndido muestrario de la más granada imaginería sacra de la pasada centuria: Castillo Lastrucci (¡de Murcia, Salzillo, y de Andalucía, Castillo!), Álvarez Duarte, Dubé de Luque, Miñarro, Espinosa Cuadros, Palma Burgos o Coullaut Varela; sin olvidar a los Hervás, Prados López, Martínez Puertas o Perceval. Con Antonio Castillo Lastrucci cerramos el capítulo iniciado la semana anterior (Cristo de la Luz daliense y la capitalina de Ntra. Señora del Amor y la Esperanza de Estudiantes), reseñando las cuatro restantes salidas de su gubia, repartidas entre Almería, Alhama y Huércal Overa. Sería de desear -lo sugiero por si cuaja la idea- que alguien verdaderamente capaz en Historia del Arte religioso emprendiera la tarea (al igual que hizo el IEA con las piezas del Barroco de toda la provincia) de su compilación monográfica, crítica y argumentada, acompañada del material gráfico pertinente.

VIRGEN DEL CONSUELO

El 10 de noviembre de 1946 el obispo de la Diócesis, Dr. Delgado Gómez, bendecía, en la iglesia de San Agustín de los PP. Franciscanos, "la nueva imagen de Nuestra Señora del Consuelo con la que la CNS enriquecerá nuestros suntuosos desfiles procesionales de la Semana Santa, al constituir una cofradía por la que los funcionarios de la Delegación Provincial de Sindicatos sienten verdadero y hondo entusiasmo". A la finalización de la misma nombraron Hermano Mayor honorario al Delegado Nacional de Sindicatos, en visita a la capital, y al recién incorporado gobernador de la Provincia, Urbina Carrera. Esta escultura en madera, tercera gubiada por Castillo Lastrucci para Almería, antecedió al grupo monumental del Descendimiento, obra no plenamente lograda de Espinosa Cuadros. La advocación del Consuelo vino por indicación de Miguel Vizcaíno Márquez, general Consejero Togado y hermano fundador, en homenaje a la de Consolación de Tices, patrona de su pueblo, Ohanes. Por mediación del alhameño Mario López Rodríguez (quien se convertiría en íntimo amigo de Castillo cuando ocupó la Secretaría General del Gobierno Civil de Sevilla durante treinta y ocho años), la Hermandad apalabró su hechura en 3.000 pesetas. Con la condición -a instancias de su consiliario, asesor religioso de Sindicatos y canónigo Magistral, el vallisoletano José Antón Ortíz- de que se asemejase a la Soledad de Zamora, por la que sentía especial devoción. Por ello la del Consuelo (cabeza baja e inclinada, ojos semicerrados, manos y dedos entrelazados, policromada con carnaciones rosas y marfileñas) difiere del habitual modelo mariano de vírgenes jóvenes, guapas y barrocas.

La Semana Santa de 1947 se inició el viernes de Dolores con el concierto sacro "Los siete Dolores de María Santísima", organizado por Educación y Descanso en el teatro Apolo bajo la dirección del joven "centenario" D. Paco Gomis. El jueves siguiente -4 de abril-, tras la Cruz alzada y otra llevada en andas, salió Ntra. Sra. del Consuelo sola, con corona labrada por el almeriense Luis Algarra, bajo palio rígido, de cajón, en un trono accionado a ruedas y profusamente iluminada por potentes focos de luz eléctrica de la acreditada Casa Segado. Con el nombre de Soledad de Nuestra Señora procesionó durante casi dos décadas las tardes del sábado Santo, sobria, en traje negro y sin palio, acompañada de un cortejo exclusivo de mujeres que recorrían las calles del populoso Distrito V, del convento Franciscano a la plaza de toros. La imagen se conserva tal y como salió del obrador de la sevillana calle de San Vicente, salvo una intervención, en las manos, de Álvarez de Duarte; aunque la Cofradía del Silencio tiene prevista la restauración urgente de sus partes dañadas por el tiempo y uso procesional.

SAN NICOLÁS DE BARI Y PURÍSIMA CONCEPCIÓN

Nuevamente será el precitado Mario López Rodríguez muñidor entusiasta de la virgen y santo titular que se veneran en la iglesia parroquial de su Alhama de Almería natal. La tradición de San Nicolás de Bari como patrón del pueblo se remonta a 1704; y la destrucción de la talla original a la guerra del 36/39. Ni la que cedió un particular ni la encargada a un escultor catalán satisfizo a los alhameños. Nuestro protagonista realizó la actual de San Nicolás, siendo, en palabras de la historiadora Mª del Carmen Amate, "D. Mario López Rodríguez, hijo de Alhama, la persona que hiciera realidad el deseo de sus paisanos al encargar una nueva imagen del Santo contactando para tal fin, con uno de los grandes tallistas imagineros del momento, el sevillano Antonio Castillo Lastrucci. El día 30 der octubre de 1949 se hacía la entrega oficial de la imagen por D. Mario López a la Hermandad Sindical de Labradores y Ganaderos de Alhama de Almería en la persona de su presidente, D. Antonio Abad Aragón, quien en nombre de la Hermandad la ofreció en depósito perpetuo al cura párroco D. Juan Rodríguez para su debida custodia… ". Su busto completo está tallado y policromado en madera; "ataviado con los atributos que son propios de su rango: la tiara, el misal y la mitra". Y a sus pies tres figuras infantiles, simbolizando uno de los milagros del Santo. La otra talla, patrona de Alhama, una Purísima Concepción inspirada en la homónima de Alonso Cano -adquirida por la parroquia tras colecta pública-, procesionó en 1955 por vez primera

Mª SANTÍSIMA DE LA ESPERANZA

Del ese año data la antigüedad de la virgen titular de la Real y Venerable Cofradía de Ntro. Padre Jesús Nazareno, Santísimo Cristo de la Misericordia y Mª Santísima de la Esperanza -Paso Morado-, quien desde 1955 enmarca las calles de Huércal Overa la tarde-noche grande del miércoles. A 1º de abril, el martes Santo, la bella dolorosa fue bendecida en la capilla del Colegio María Inmaculada, saliendo en valiosa carroza al día siguiente, bajo palio, junto al Nazareno del inmortal Salzillo y el Cristo de Bellver. Y el viernes Santo, en "fervorosísima Procesión al Calvario con Ntro. Padre Jesús Nazareno (…) poniendo la nota de mayor emoción religioso en la Semana Santa de Huércal Overa".