José Magaña, deportista y bohemio

RESULTA que tengo de uñas al entrañable Ramón Magaña, artista variopinto donde los haya: extorero y asesor taurino, cocinero y reputado artesano en la elaboración de prendas de cuero, filósofo. Y todo por culpa de un supuesto agravio comparativo. "Muy bonito, al poeta Francisco Villaespesa le dedicas siete reportajes en el periódico y a mí nada más que dos", me larga con una media sonrisa socarrona en presencia del común amigo Marco Rubio de Bustos. Ante tamaño dislate le razoné que no solo presté página a su biografía, que también, sino a su vasta obra literaria. Hemos hecho las paces aunque no sé si lo he convencido de las diferencias mediáticas… Bromas aparte, lo cierto es que le debía una crónica a su hermano José y al entorno en que se desenvolvió.

Con el fin de contextualizarlo en el espacio-tiempo, es aconsejable conocer en lo posible el apellido en cuestión. El de Magaña resulta relativamente usual por estos lares. El DRAE y el Vocabulario Andaluz de Alcalá Venceslada se muestran en cambio lacónicos y escasamente generosos en su doble acepción: "Ardid, astucia, engaño (posiblemente de origen prerromano); Legaña". Siguiendo su pista en la Red y páginas genealógicas al parecer solventes, compruebo que proceden de Soria (en el Valle de Rituerto hay una villa con tal nombre), País Vasco y Navarra, de donde saltaron a las Islas Canarias. "Magaña" está hoy presente en 52 provincias españolas, siendo Almería la tercera tras Barcelona y Madrid: sumando primer y segundo apellido la provincia censa un total de 439. Cuándo llegaron aquí?, supongo que en algún repoblamiento de "cristianos viejos" en siglos atrás; no en la capital -el Libro de Apeos no los contempla- sino focalizados en el área Gérgal-Tabernas.

Desde 1864 hay rotulada una calle en el Barrio Alto, según Tapia Garrido en recuerdo al médico José Magaña, del que no tengo información. El Diccionario Biográfico del IEA sí recoge a José Magaña Expósito (Lucainena de las Torres, 1910-Almería, 2002): alistado en las Milicias Populares combatió en la batalla del Ebro y posteriormente en la Resistencia francesa frente a Alemania y en 1945 como guerrillero del Maquis en los Pirineos. Y a Encarnación Magaña Gómez (Tabernas, 1921-Almería, 1942), joven que figura con nombre propio en la historia local por ser la única mujer fusilada en las tapias del cementerio tras la condena de muerte dictada por lo tribunales de Franco, acusada en el llamado "Parte Inglés" de pertenecer a la organización clandestina que distribuía noticias en español de la BBC inglesa. Por lo general todos los procedentes del marco geográfico antedicho están empadronados como trabajadores en distintos oficios.

PARTO DIFÍCIL

Difícil por las críticas circunstancias en que se produjo. Acunado por sirenas de alarmas y bombardeos de aviones fascistas, vino al mundo el 30 de junio de 1938 en la calle Cantares. No extraña por tanto que su madre, la abderitana Isabel Sánchez Piqueras, tuviese en ocasiones que darle de mamar en el refugio de la placita aledaña al nº 23, con todos los riesgos que esto conllevaba. Casada con José Magaña Martínez, de ascendencia gergaleña por ambas ramas, al terminar la guerra cambiaron el domicilio a la c/. Zagal, donde nacieron sus otros tres hijos: Juan (fallecido), Antonio y Ramón. El sustento se hizo muy cuesta arriba, aunque el salario del padre en los talleres ferroviarios -donde ingresó recomendado por su cuñado Sebastián Plaza- palió el duro trance con ayuda del Economato de Renfe al servicio de los empleados.

Los cuatro asistieron a la escuela primaria abierta por la sociedad Motoaznar en la calle Sicardó; continuando Pepe en la Escuela de Formación Profesional, también al otro lado de la Rambla. Allí aprendió la talla en madera; y el grabado en mármol con un artesano del Zapillo: cinceló el rostro de Santiago Martín "El Viti" y éste -agradecido por su perfección- le regaló un traje de luces a su hermano Ramón. Siendo ya un mozalbete de excelente planta, la vocación deportiva se le despertó en la Escuela de Formación, cantera de buenos porteros de fútbol y balonmano forjados en sus instalaciones

JUVENILES

El Atlético Baleares fue el primer club en el que militó, jugando el Campeonato Provincial para aficionados en el Campo del Gas, en Las Almadrabillas. Captado por el Almería, lo cedió al filial Trafalgar de Adra y luego estuvo en El Ejido (cobrando 300 pesetas mensuales), antes de regresar al equipo representativo de la capital y con el que ascendió a 2ª División en la temporada 1957/58, siendo presidente Francisco Gómez Angulo. Al cerrarle el paso los titulares Puche y Gascón optó por marcharse al Ronda (junto a los también almerienses Coloma y Torreblanca), donde firmó, por ¡veinticinco mil pesetas!, su primer contrato profesional y con el que todo feliz pudo regalarle a su madre un moderno aparato de radio. Su trayectoria profesional le llevó a vestirse el jersey del Compostela, Béjar Industrial (con este jugó la final de la liguilla de ascenso a Segunda precisamente contra los gallegos), Águilas y por último (1967) el Linares, donde en su campo de Santa Ana se retiró para afincarse en Almería hasta su prematuro fallecimiento el 9 de mayo de 1991 en su casa de c/. Mónsul nº 3. En 1963 se había casado con Francisca Luque Cruz, de cuyo matrimonio nacieron Isabel, José Antonio y Francisca. Aseguran que el hijo, siguiendo la estela del padre (Pavía, Berja o Comarca de Níjar), ha sido otro excelente cancerbero: "un gato en las distancias cortas" y espectacular en las "palomitas" que prodigaba.

SALA DE FIESTAS

Abierto por Nicolás López, Antonio Mota y Pepe Barranquete, el Club Chapina compitió mediada la década de los sesenta con el Hoango (Zapillo) y el tablao flamenco del cantaor Manolo Terrón "Manzanilla" por la hegemonía de los locales nocturnos de diversión: ballet, orquestas, chicas "alegres"... En el de la calle Lirón (próximo a la plaza Flores y cine Listz) trabajó José Magaña Sánchez desde su retorno: como responsable del acceso al interior y posteriormente, cuando lo regentaba su compadre Antonio Abad "El Pireo", de camarero en la barra. En los inviernos de 1975/76 lo hizo en Parrilla Las Conchas, del amigo Esteban Núñez. Experto en el billar americano y las "41", aprendido en los cafés Colón y Español, siguió practicándolo en La Ruleta, bar en calle Las Cruces de su íntimo y generoso Manolo González. Ameno conversador, recordaba que durante su estancia en Águilas entabló sincera amistad con el actor Paco Rabal y su esposa Asunción Balaguer; antes, en Ronda, alternó con Cayetano Ordóñez "Niño de la Palma" en noches eternas de vino y rosas. Su otra fuente de ingreso, bohemia al margen, fueron los magníficos dibujos a carboncillo que realizaba por encargo. Por su calidad me quedo con los de Manolete, para el bar "Quinto Toro" de Juan Leal, y el de Paco de Lucía existente en la peña El Taranto.