La Mancha que vio Cervantes (11)

CERVANTES sitúa las hazañas de su fantástico hidalgo en La Mancha, tierra con una importante implantación de las Órdenes Militares y de reciente colonización, que debía conservar aún a fines del siglo XVI, mucho de su primitivo carácter fronterizo y pionero, con extensos cazaderos y pastaderos, y grandes superficies incultas y mal pobladas, sobre las cuales se proyectará la presión roturadora, puesta de manifiesto por las Relaciones Topográficas de los Pueblos de España de Felipe II, 1575 y 1578 (Archivo/Biblioteca del Real Monasterio de El Escorial).

QUINTANAR DE LA ORDEN

"Esta villa tiene privilegio antiguo, de los maestres pasados, para poder pastar con sus ganados y abrevarlos, arar y rozar y hacer otros aprovechamientos en todos los términos de la Orden de Santiago, como los vecinos de la dicha Orden como una de las siete villas privilegiadas, libremente y sin pena alguna."

LA RODA

"Es tierra sin riego alguno y es abundosa cuando llueve mucho, y que se ha arrasado la tierra en la que es útil y buena para labranzas, y la que es inútil y delgada está llena de atochares y romerales, donde se provee esta villa de leña."

ARGAMASILLA DE ALBA

"Este pueblo cae en la Orden y Priorazgo de San Juan… En este dicho término se crían y hay venados, conejos, liebres, perdices, lobos y zorras, y que el dicho Prior de San Juan tiene puestas guardas, para guardar los montes y términos y las dichas cazas. Y, los que matan venados y otras cazas, contra las leyes de estos Reinos y un arancel que tiene dado a su alcaide de Peñarroya, son castigados.

Esta caza de venados ni las demás no se arriendan, sino que sólo las hace guardar el dicho Prior, para cuando viene a esta tierra."

En el Tiempo del Quijote, a pesar del inexorable avance de las roturaciones desde bastantes años atrás, importantes extensiones del territorio manchego presentaban un arbolado, especialmente encinas, aclarado, en 1575 la villa de Las Mesas, al referirse a la Dehesa Vieja, dice: "por ser monte hueco y raso no se crían en

él sino muy poquita caza". El sistema agrario era mixto: agrícola, ganadero, forestal y cinegético.

La dehesa, generalmente acotada, respecto a su propiedad y explotación presenta un régimen jurídico-administrativo heterogéneo. En Argamasilla de Alba dos dehesas, en la ribera del Guadiana, pertenecen a la Orden de San Juan, y otras tres al concejo: dos situadas "a las partes del dicho río Guadiana", y la "dehesa boyal".

Éste tiene arrendada la dehesa de Santa María por diez años en 2.200 ducados, "para hacer la iglesia de esta villa que se va edificando, y para ayudar a hacer un alorique, que se ha empezado a fundar en esta villa, para los pobres, y parte para gastos del dicho concejo".

La villa de Las Mesas, simultáneamente a la información sobre explotación de las bellotas de las encinas como alimento humano, proporciona otras noticias de interés referentes a la Dehesa Vieja: "Tres manadas de ganado de los carniceros nunca salen de ella, y el ganado del concejo que es mucho. Es dehesa privilegiada, no puede entrar otro ganado sino es el del carnicero y abastecedor, y los bueyes y ganado menudo del concejo".

Las Relaciones Topográficas de los Pueblos de España de Felipe II son representativas, del sentir y de la actitud ambiental, de la región y época en que se generan, en cuanto constituyen una muestra suficientemente amplia.

Argamasilla de Alba al hablar del monte de "carrasca y romero" dice que, por "ser la tierra floja de poco aforo, va en mucha disminución, porque lo que se corta una vez poco de ello vuelve", y respecto a la dehesa de San Agustín afirma: "no se ha arrendado, ni se arrienda hasta que esté criado el monte, porque lo menos serán menester más de otros diez años".

LA RODA

"Es tierra de mucha caza, especialmente de liebres, las cuales hay muchas y se cazan muy fácilmente con, caballo y galgos, porque, como es tierra tan rasa, no se pierde de vista, ni tienen donde esconderse. Siendo la dicha caza común.

Y, hay asimismo muchas perdices y algunos conejos, aunque pocos, por ser la tierra llana.

Ha pocos años que se acabó la caza de los venados, que había muchos. Y, podrá haber cuarenta años que había muchas enzebras en término de esta villa, y se ha acabado asimismo la dicha caza."

CHINCHILLA

"Esta ciudad está en la Mancha de Aragón, confina con el Reino de Murcia.

Es tierra montuosa por la parte del oriente y mediodía, que por la parte del poniente y septentrión es tierra muy llana. No hay otra cosa sino atochares y espartales, con algunos pocos de romeros y aliagas, coscojas pocas, como es tierra antigua tiene ya muy lejos la leña. Abunda de pinos y encinas, romerales y retamales en gran cantidad, hay muchas coscojas.

Críase, en esta tierra, muchos venados, corzos, gatos monteses, y algunas veces se hallan puercos y cabras monteses.

Una especie de salvajinos hubo, en nuestro tiempo en esta tierra, que no la ha habido en toda España sino aquí, que fueron enzebras. Que había muchas y tantas que destruían los panes y sembrados.

Son a manera de yeguas cenizosas, de color de pelo de rata, un poco mohínas, relinchaban como yeguas.

Corrían tanto que no había caballo que las alcanzase; y para aventarlas de los panes, los señores de ellos, se ponían en paradas con caballos y galgos, que otros perros no las podían alcanzar, y de esta manera las aventaban, que matar no podían por su ligereza."

LAS MESAS

"Por estar tan raso todo el término no se cría ninguna caza, y si algunas perdices se crían las aves de rapiña las matan, por no tener en donde esconderse."