María del Mar Pageo es médica especialista en Geriatría y presidenta en Andalucía de Cruz Roja, una organización que pretende “seguir dando respuesta a las personas, cada vez con mayor eficacia y eficiencia; mantener la sostenibilidad de la institución, y seguir generando confianza en la sociedad para mejorar y minimizar la desigualdad”.

Así lo asegura en una entrevista con EFE, a la vez que señala que la ONG también lleva por bandera ser “extremadamente transparente” con sus actividades y cuentas. “Somos muy generalistas y trabajamos desde muchos ámbitos (…) Cuando hay una emergencia, somos los primeros que estamos ahí”, apunta.

Pageo destaca que esto ha pasado en momentos tan duros como la llegada de pandemia, cuando los voluntarios de Cruz Roja permanecieron a pie de calle para dar una respuesta a mayores, personas con discapacidad o en situación de calle. “Nos recompusimos para trabajar, hacer las cosas por otra vía, también digital”, precisa.

Precisamente, entre los objetivos de futuro de Cruz Roja en Andalucía se encuentra la formación en habilidades digitales, “uno de los 'hándicaps' de muchísimas personas, y más si sufren alguna vulnerabilidad”. “Es fundamental, para las personas mayores, para la infancia (…) Y no solamente la formación, sino el acceso a una red WiFi, la equiparación para poder acceder”, asevera.

Porque, sostiene, esta brecha digital “existe” y “genera más pobreza” por la falta de oportunidades. Ello hace que este asunto se trabaje en todos los proyectos de modo transversal, ya sean para fomentar el empleo o en la propia acogida de inmigrantes en centros humanitarios, dónde aparte del idioma, el apoyo psicológico y otros asuntos, se trabaja con ellos en esta materia.

EL FUTURO CERCANO

En marzo se celebrará la asamblea general de Cruz Roja, que marcará las líneas de trabajo de la organización. Pageo asegura que el plan general es “seguir dando respuesta a las personas que lo necesitan. Dar una respuesta humanitaria sin discriminación”.

“Nuestro proyecto es seguir estando ahí y, por otro lado, conseguir que la administración siga confiando en nosotros y aportando esas subvenciones para distintas líneas para consolidar y mantener la estructura que tenemos preparada para las emergencias y dar respuesta. Y otro gran objetivo es conseguir que la sociedad también siga confiando en nosotros”, resalta.

María del Mar Pageo, presidenta en Andalucía de Cruz Roja.

Pageo mantiene que son “muchas” las personas que ya confían en la ONG, y destaca la “gran masa social” que está conformada por socios, voluntarios y técnicos.

“Como otras entidades nos beneficiamos del 0,7 del IRPF. Este año sí que hemos sufrido una bajada importante y eso nos complica mucho para seguir manteniendo proyectos que llevamos manteniendo desde hace tiempo. Es verdad que nosotros contamos con unos fondos propios. YY los dedicamos allí donde la administración no llega, pero también son finitos”, revela.

Con todo, recuerda que durante la pandemia han gestionado “una cantidad importante de dinero” con las tarjetas monedero, “una respuesta a artículos de primera necesidad, desde la dignidad con una tarjeta”.

LA ENTIDAD

Aunque las cifras “dan una idea de volumen, pero no de calidad”, Pageo detalla que Cruz Roja Andalucía cuenta con unos 37.000 voluntarios y más de 150.000 socios, así como unas 2.150 empresas socias. El año pasado la entidad dio respuesta a unas 600.000 personas y cuenta con más de 300 trabajadores.

“Cruz Roja es una institución humanitaria y generalista. En 2022 dimos respuesta a familias completas, a jóvenes, a la infancia, a personas mayores, a inmigrantes, a mujeres víctimas de la violencia de género, y un larguísimo etcétera, desde programas de empleo, de atención a la extrema vulnerabilidad o a la familia, o de atención a los mayores, entre otros.

Otra faceta más desconocida es la medio ambiental. “Estamos reduciendo nuestra huella de carbono y ahí somos la primera institución en Andalucía que está trabajando y reduciéndola, y así lo ha reconocido la Consejería de Medio Ambiente”. “Trabajamos en las reforestaciones (…) en toda Andalucía. Y desde los programas de medio ambiente trabajamos la pobreza energética”, dice.

UN AÑO COMPLICADO

“El año pasado todavía continuaban las secuelas de la pandemia a nivel económico y social (...) Y luego vino la agravante de la de la guerra de Ucrania. Formamos parte como institución, como entidad colaboradora del Ministerio para la acogida de las personas que venían de Ucrania. Todo eso incrementó muchísimo la la actividad de Cruz Roja. Claro que sí”, relata Pageo.

María del Mar Pageo, presidenta en Andalucía de Cruz Roja.

Asegura que en este contexto los que primero sufren las consecuencias son “las personas que ya tenían una vulnerabilidad previa”, familias en situación de pobreza o en riesgo de exclusión social”, pero incide en que a raíz de la covid-19 también se han visto afectadas “personas que nunca habían tenido una necesidad”,

Además, insiste también en que “las personas mayores lo pasaron muy mal durante la pandemia y eso ha dejado secuelas muy importantes”. “Esa soledad que sufrieron las personas mayores ha hecho mucha merma, mucha merma sus capacidades (...) en el modo de afrontar su vida y eso todavía lo seguimos sufriendo”, lamenta.

Pero dentro de su capacidad de “adaptación”, Cruz Roja busca la forma de detectar estas situaciones, también con el apoyo de la tecnología y el “big data”, que ya les ha permitido “innovar y anticiparse al futuro”.