Mató a su amigo porque empujó a su madre y "se me fue la olla"

Luis Enrique A. R. que responde ante un jurado por la muerte de Pedro V. R. a quien presuntamente propinó una puñalada por la espalda con un cuchillo de 23 centímetros, aseguró que pese a que "no recuerda" todo lo que ocurrió en la madrugada del 5 de mayo de 2008, se le pudo "ir la olla" al ver que empujaba a su madre. El acusado y su defensa tienen que desmontar la presencia de una huella dactilar en el arma homicida y han adoptado la estrategia de "grave alteración de sus capacidades" puesto que horas antes del crimen había tomado "cocaína, tranquimazín, metaanfetaminas, valium, güisqui, metadona y varias cervezas".

Esta circunstancia ha sido respaldada por el informe de los médicos forenses que examinaron al acusado, por lo que el Ministerio público podría cambiar la pena de 17 años de cárcel que solicita por un internamiento en un centro psiquiátrico y de deshabituación del consumo de drogas.

A las 5:00 horas del 5 de mayo de 2008 después de que víctima y acusado estuvieran tomando unas copas y a raíz de unos juegos con una pistola de agua, comenzaron una riña en la que el hoy enjuiciado terminó con un golpe en la oreja. Poco después y en compañía de otro amigo adquirió una pequeña cantidad de cocaína que quiso consumir en el domicilio de su madre. Fue entonces cuando Pedro entró en la vivienda y fue entonces cuando, según su testimonio, "le dio un empujón para atrás y se me fue la olla". La víctima terminó con una cuchillada por la espalda, "mortal de necesidad" que le atravesó el hígado y el ventrículo derecho.