Medgaz culmina la conexión de gas entre Argelia y Almería

La soldadura que sirve de enganche entre la tubería tendida en baja profundidad junto al litoral argelino, y la que tiene su origen en la costa almeriense, instalada en aguas más profundas, ya está ejecutada. Según comunicó el consorcio de empresas Medgaz, la firma ha completado el tendido del gasoducto que unirá directamente Argelia con España, después de que las obras comenzasen a mediados de 2007. Saipem S.p.A., empresa italiana encargada de construir la infraestructura submarina, ha finalizado el enlace de 210 kilómetros entre Beni Saf (costa argelina) y Almería con la realización de la llamada "última soldadura".

La última operación ha sido llevada a cabo a 1,6 kilómetros de la playa argelina de Beni Saf por el Crawler. Se trata del barco encargado de elevar el tubo abandonado por el Castoro Sei en julio de 2008 y el tubo abandonado por el Saipem 7000 el pasado mes de noviembre, para realizar la unión definitiva y volver a tender sobre el lecho marino el enlace final entre la costa europea y africana.

La construcción del gasoducto submarino se ha completado dentro de los plazos previstos, con un ligero retraso en la última operación a causa de las inclemencias meteorológicas. Entre marzo y junio de 2008 el Castoro Sei, buque encargado de construir los tramos poco profundos, en torno a 550 metros, y que soldó y montó parte del gasoducto, tanto en la costa argelina como en la almeriense, concretamente esta embarcación fue la encargada de instalar los tubos de la infraestructura en los primeros 35 kilómetros desde la playa de El Perdigal, ubicación de la estación de recepción de la compañía.

Entre agosto y noviembre de este año, la plataforma Saipem 7000 realizó el tendido en las zonas más profundas del trazado, de hasta 2.160 metros. Pero hubo un parón en las obras entre el 17 de septiembre y el 9 de octubre tras el accidente sufrido a bordo de la plataforma en el que fallecieron cuatro personas. A pesar de la parada, el plazo previsto para la ejecución no se vio afectado, pues según afirmó a finales de septiembre en Almería el director general de Medgaz, Juan Antonio Vera, "la parte marina del proyecto tenía un colchón de tres meses en el plan de puesta en marcha". En octubre las labores de construcción se reanudaron una vez que se confirmaron las condiciones de seguridad.

Con la "última soldadura" realizada por Crawler, se da por cerrado el montaje del primer gasoducto a más de 2.000 metros de profundidad que se construye en el Mediterráneo.

Entre enero y marzo de 2009 tendrán lugar las pruebas hidráulicas con el fin de comprobar el buen funcionamiento del gasoducto antes de su puesta en marcha, prevista para la segunda mitad del próximo año.

El proyecto promovido por Medgaz es estratégico tanto para Argelia y España como para el resto de Europa. Por una parte, acercará gas natural argelino mediante un enlace directo, lo que contribuirá a mejorar la seguridad de suministro. Por otra, es la vía más económica de aprovisionamiento de gas natural al sur de Europa. Adicionalmente, el futuro enlace submarino contribuirá a alcanzar los objetivos marcados en el Protocolo de Kyoto.

Con una capacidad inicial de 8.000 millones metros cúbicos al año, el consorcio empresarial transportará gas natural desde Beni-Saf, en la costa argelina, hasta Almería.

La longitud del trazado es de 210 kilómetros sumergidos sobre el lecho mediterráneo y alcanza una profundidad máxima de 2.160 metros. En Argelia, enlaza con el gasoducto Hassi R'Mel-Beni Saf, gestionado por la firma Sonatrach. En España, conectará con el gasoducto Almería-Albacete, de Enagás. Esto facilitará su integración en el sistema gasista español y europeo.