El fenómeno migratorio es una constante histórica en los anales de la provincia almeriense. Desde la floreciente Al Ándalus a nuestros días. De doble flujo: como “exportadora” de hombres y mujeres tierra de acogida. Las causas humanas, políticas, geográficas o socioeconómicas que ocasionan el vaciamiento poblacional están debidamente documentadas. En el segundo supuesto, de un total de 727 mil habitantes en 2020, fuentes estadísticas cifran en un 20 % el número de ciudadanos de más de un centenar de países, procedentes de América, Europa y África (Marruecos aporta el 8 %).

Enfatizando en su condición femenina, para un reducido número de politólogos ello supuso, inexplicablemente, un plus añadido en la trayectoria de Carmen “Carme” Chacón Piqueras, cuando es notorio que figura por méritos propios en el reducido grupo de influyentes mujeres españolas del siglo XXI. Servidora pública con sentido de Estado, referente en el concierto político, hecha a sí mismo desde la inteligencia, el tesón, honestidad, trabajo y lucha insobornable por los derechos de la mujer, como lo fue una centuria antes Carmen de Burgos. Una mujer de quien la provincia -a la que se confesaba unida por fuertes lazos de sangre- se mostraba orgullosa y a la que mostró su pesar y cariño en el duro trance de una muerte tan cruel como prematura. No en vano se sentía cómoda y orgullosa con su triple “nacionalidad”: española, catalana y almeriense-andaluza.

Carmen Chacón

Ello justifica que el Ayuntamiento de Olula del Río decretase un día de luto oficial y que su alcalde, Antonio Martínez –“de la misma quinta”- destacase que “Chacón mantenía muy buenos amigos en el pueblo, donde estudió al menos dos cursos en el colegio local, entre los siete y ocho años… Solía venir con frecuencia. Aquí tiene una casa y no se perdía ningún evento familiar, como bautizos, bodas o comuniones y sobrinos que residen aquí”. O bien recordando que pasaba temporadas estivales en una <cueva> familiar en el paraje costero de San Juan de Terreros, en Pulpí… Una gran persona, una gran mujer, buena en lo personal y en su trayectoria política y profesional, digna de recordar, con un gran mérito y un ejemplo, concluía. De ahí que adoptase el eslogan de <Espíritu de Olula> cuando en enero de 2012 intentó liderar al PSOE como secretaria general, en buena lid con Pérez Rubalcaba, con quien perdió por 22 votos de diferencia. Este sería el acto más concurrido y mediático celebrado en la villa del valle medio del Almanzora.

Esplugas de Llobregat

Su padre, Baltasar Chacón, estudió el bachillerato en Albóx y concluyó la carrera de arquitecto técnico. Marchó a Cataluña donde, residiendo en Esplugas se casó con la abogada Esther Piqueras, nieta de un anarquista aragonés. Hija mayor del matrimonio, Carmen nació el 13 de marzo de 1971. Se licenció y doctoró en Derecho en la Autónoma de Barcelona y en Manchester, con cursos de posgrado en Kingston, York, Montreal y Laval. Currículo que, además de su profesorado de Derecho Constitucional en la Universidad de Gerona, avala su sólida formación como jurista y docente.

Casada en 2007 con el periodista Miguel Barroso (de quien se divorció una década después), era madre de un hijo, Miguel. Víctima de una cardiopatía congénita, falleció el 9 de abril de 2017 en su domicilio madrileño, donde fue hallada por un familiar.

Política socialista

Con 16 años ingresó en Juventudes Socialistas de Cataluña, en 1994 en el PSC y seguidamente en el PSOE. Daba así inició a una intensa andadura. Además de teniente de alcalde en el ayuntamiento de Esplugas y observadora internacional en Albania y Bosnia Herzegovina.  En 2002 consiguió el acta de diputada a Cortes por Barcelona, siendo reelegida dos años más adelante. Y en 2015, tras un periodo de profesorado en el Miami Dade College. Vicepresidenta del Congreso de los Diputados, Carmen ocupó dos carteras ministeriales: el de la Vivienda (2007-2008) y el más conocido de Defensa (2008-2011), la primera mujer en ocuparla en España. Embarazada de siete meses, su fotografía pasando revista militar ha sido ampliamente difundida dada su excepcionalidad.El nombre de Carme Chacón se hizo habitual en los medios de comunicación por -amén de las funciones propias del cargo- su presencia, visitando a tropas del ejército español y en negociaciones en la OTAN, Kosovo, EEUU, Somalia, Afganistán, Congo, Líbano o en los Balcanes. En octubre de 2010 repitió visita al campamento “Álvarez de Sotomayor”, en Viator, donde felicitó a las fuerzas de La Legión tras participar en operaciones en algunos de los países citados.