El Obispado rechaza ahora el cambio de carrera oficial de la Semana Santa

Más que oler a cera, la Semana Santa de la capital ha comenzado a arder antes de tiempo; concretamente desde la noche del pasado jueves en la que tuvo lugar una asamblea general de la Agrupación de Hermandades y Cofradías convocada por el presidente José Antonio Sánchez Santander para ultimar los detalles de los horarios e itinerarios de los desfiles procesionales, tras la aprobación el pasado 27 de enero por parte del obispo de la Diócesis, Adolfo González Montes, del cambio de carrera oficial "de forma experimental". Sin embargo, Sánchez Santander, enviaba una nota de prensa en la madrugada de ayer comunicando que la carrera oficial se mantendrá en el Paseo de Almería por acuerdo de los hermanos mayores de las cofradías penitenciales "ante las presiones o coacciones recibidas desde las instituciones relacionadas con la Semana Santa de Almería", dejando a cada hermandad la libertad para pasar ante la Catedral. Esas presiones o coacciones, según fuentes de la Agrupación, vendrían desde el Obispado y el Ayuntamiento ante la disconformidad con que las cofradías no incluyeran, a excepción de dos, el Paseo de Almería en sus recorridos.

Sánchez Santander no quiso ofrecer ayer ninguna declaración, remitiendo al comunicado en el que afirma comprender y respetar la decisión tomada por los hermanos mayores "ante la encrucijada en la que se les ha puesto, pero yo tengo que ser leal a los criterios que he mantenido en defensa de lo acordado en su día en cabildo extraordinario". Por su parte, el vicario episcopal para la Acción Pastoral y el Apostolado Seglar, y consiliario de la Agrupación, Manuel Pozo, declaró que "el tema no estaba lo suficientemente maduro para tomar una decisión que, de alguna forma, comprometía también a la Agrupación", argumentando que el Paseo de Almería es una referencia "y habría que pensar si es conveniente irnos a otro lugar a experimentar". Otro de los argumentos esgrimidos es que en la nueva carrera oficial, "que ciertamente hay que reivindicar y estudiar", no se iban a colocar tribunas, mientras en el Paseo de Almería se colocan gradas con 3.500 asientos para contemplar el paso de los desfiles procesionales. Ese cambio podría dar lugar, afirmó Pozo, "a manifestaciones religiosas más piadosas y hermosas, pero sin la presencia del pueblo, por lo que ese traslado no ha estado claro "desde las autoridades civiles y eclesiásticas".

Según el consiliario de la Agrupación, el Obispado ha recibido "muchísimas cartas, correos electrónicos y visitas de muchas personas que han protestado vivamente por la pérdida del Paseo para la Semana Santa". Pozo también recordó que "a quien compete el cambio en última instancia es al obispo, según las Normas Diocesanas que todos, empezando por el presidente de la Agrupación, han acatado, y si no las acatan están de más".

Por otra parte, y ante las noticias que aparecían en las redes sociales sobre la intervención del alcalde de la ciudad, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, en la decisión del obispo, el Ayuntamiento emitió un comunicado en el que señala que "ha respetado y respetará cualquier decisión de la Hermandad de Cofradías o del Obispado respecto de la situación de los tramos considerados como Carrera Oficial en los desfiles procesionales de Semana Santa. El Ayuntamiento se ha limitado a instar a los organizadores a considerar la conveniencia de mantener al Paseo de Almería dentro del recorrido de las diferentes cofradías y hermandades, por estimar que es el tramo urbano que permite una mayor y más cómoda afluencia de público, todo ello con independencia de la consideración de oficialidad o no que se le quiera otorgar a esa calle". El comunicado concluye indicando que el Ayuntamiento "está muy satisfecho del nivel de colaboración, entendimiento y diálogo que en todo momento se ha disfrutado a la hora de organizar y coordinar el desarrollo de la Semana Santa, y espera que ese mismo espíritu siga imperando en todo momento". Sin embargo, Adrián Martínez, vicepresidente de la Agrupación, teme que tampoco se pongan gradas en el Paseo "ante la falta de presupuesto municipal para su instalación".