La dirección del PSOE sentencia a Juan Carlos Usero como portavoz municipal

Tal y como adelantó ayer Diario de Almería, Juan Carlos Usero puede estar viviendo sus últimas horas como portavoz del grupo municipal socialista en la capital almeriense. El enfrentamiento con la secretaria general de su agrupación ha podido ser el último con el que tenga que enfrentarse en su ya dilatada carrera política. Un asunto de contratación de personal generó una tormenta perfecta que alimentó las poco disimuladas diferencias que se han producido a lo largo del último año entre el todavía representante municipal con la Ejecutiva provincial de los socialistas almerienses surgida tras el Congreso extraordinario que aupó a José Luis Sánchez Teruel a la Secretaría General.

La "falta de sintonía" con la labor del portavoz lanzada a los cuatro vientos por Josefa Requena en la Cadena Ser y las acusaciones de Usero de tener interés en la contratación de su hermano (Manuel Requena quien fuera delegado provincial de Hacienda y uno de los miembros más activos en el equipo jurídico de la actual Ejecutiva) ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de la dirección provincial almeriense. Si hasta el jueves los deseos de relevo de Juan Carlos Usero eran un secreto poco disimulado, desde ese día se proclaman a voces.

En cualquiera de los casos, el enfrentamiento entre el grupo municipal y la asamblea local adquirió tal calibre que obligó a la intervención de la Ejecutiva provincial que se hizo cargo de la situación, tal y como obligan los estatutos del partido. Desde primera hora de la mañana, las reuniones en la sede de la avenida Pablo Iglesias se sucedieron para tratar de habilitar un cortafuegos a algo que corre de nuevo el peligro de cerrarse en falso, aunque las intenciones del partido son la de concluirlo a comienzos de la próxima semana.

Juan Carlos Usero ha perdido un pulso que no ha iniciado y la dirección provincial le dio a elegir entre uno de los dos asesores con los que pensaba contar. El otro sería Manuel Requena, hermano de la secretaria general de la asamblea local del PSOE de la capital almeriense que consigue lo que buscó de un principio. Ese al menos fue el detonante; la ausencia absoluta de relación con la Ejecutiva es el fondo de una crisis permanente que sólo se saldará con la salida del portavoz.

Fue el propio Usero quien desde primera hora del jueves trató de poner en contacto con Josefa Requena para tratar de convocar una reunión de la ejecutiva local (o al menos de algunos de sus integrantes) y aclarar el asunto. Más de una docena de mensajes a su teléfono móvil (Diario de Almería fue testigo) son una buena prueba de ello; los primeros se mandaron a las cuatro de la madrugada.

Esa reunión se producirá finalmente el próximo lunes y a la misma han sido citados los dos protagonistas del enfrentamiento, es decir, Juan Carlos Usero y Josefa Requena. La decisión de la Ejecutiva es firme: Manuel Requena será finalmente personal del grupo socialista en el Ayuntamiento; lo respalda la agrupación local y la Ejecutiva provincial.

Queda por aclarar dos asuntos: el primero de ellos las intenciones del propio Usero quien, al menos hasta ayer, no parecía muy por la labor de facilitar una salida y su experiencia anterior en la asamblea local donde no dimitió hasta que los estatutos le obligaban a hacerlo, es una buena prueba de ello. La segunda es la actitud del resto de los concejales que componen el grupo socialista. Hasta el momento se han mantenido junto a su portavoz, al menos ese núcleo duro formado por Clara Inés Rodríguez, Juan Antonio Bisbal y Déborah Serón. De su actitud en las próximas horas dependerá el futuro mismo del grupo al que le quedan casi tres años de legislatura.

No se descarta ninguna salida, desde la simple sustitución de Usero, hasta la más traumática que puede pasar por su renuncia como concejal. Las dos están igual de abiertas, con las mismas posibilidades. Lo que sí parece claro es que el PSOE quiere dar un giro radical en el rumbo que debe adoptar la labor de oposición en el Ayuntamiento y comenzar a recuperar una calle que les ha dado la espalda en las últimas convocatorias electorales.