El Pozo de los Frailes se transforma en Belén con la implicación del pueblo

Las costumbres y tradiciones son importantes. Más aún en los pequeños pueblos ya que transmiten valores compartidos de generación en generación. En Níjar, en concreto, en el Pozo de los Failes hay una tradición que se celebra cada Navidad y que hace que todo el pueblo se una para llevar a cabo su Belén Viviente. De nuevo, en la navidad de 2016, y tras más de 10 años desde su primera edición, los vecinos de esta pedanía nijareña han querido emular el día del nacimiento de Jesús de Nazaret a través de su magnífico Belén Viviente, que representaron la tarde del lunes.

Más de 100 personas han protagonizado este montaje en que niños y adultos se implican primero preparando el entorno y después mediante la caracterizacción de los personajes. Pastores, artesanos, panaderos comerciantes... hasta llegar al pesebre con María, José y el niño Jesús arropados por los ángeles pudieron verse en la zona de la antigua Noria, donde se realizó esta obra ante la mirada de muchos visitantes.

Desde la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Níjar han ensalzado esta iniciativa popular que ha permitido que "el reloj se para y se retroceda en el tiempo" conviertiendose el Pozo de los Frailes en Belén. Y es que han asegurado desde el consistorio que con la puesta en escena de esta representación "no sólo el tiempo se para sino también el paisaje cambia. El Pozo de los Fraile se convierte en el Belén del año cero".

Además, desde el Ayuntamiento de Níjar destacan que en este belén viviente "todo un pueblo sale a la calle para disfrutar de su tradicional representación, en el que los niños han sido los protagonistas principales".

"Queremos alabar la colaboración de todo el pueblo y de los vecinos de San José que se han volcado para que todo saliese a la perfección. No faltaba un detalle para que todos disfrutaran de una magnífica tarde navideña junto a la Noria del Pozo", han destacado desde el equipo de gobierno municipal del Ayuntamiento de Níjar.