Roban dos ponis, perros de raza peligrosa y degüellan y revientan el cráneo a otro

El Centro Municipal Zoosanitario sufrió la pasada noche del domingo al lunes el asalto más brutal a estas instalaciones, que ha acabado con la muerte de un perro, al que reventaron el cráneo y también degollaron, y con el robo de dos ponis y seis canes, cinco adultos de razas potencialmente peligrosas junto a un cachorro. Los asaltantes soltaron los ponis, que han podido ser rescatados por la Policía Local -uno en las proximidades del parque del Andarax y el otro, en una calle del barrio de El Puche- y devueltos a los espacios habilitados para equinos del Zoosanitario.

Las investigaciones siguen su curso para poder detener a los asaltantes que utilizaron la técnica del alunizaje, posiblemente con vehículo todoterreno, para poder derribar la puerta principal de acceso al centro municipal, aprovechando la ausencia de vigilancia, tanto de personal como de cámaras de vídeo. La impunidad con la que han podido actuar los autores del robo de perros de razas peligrosas (PPP), en su mayoría Pit Bull y posiblemente para su uso en peleas ilegales, ha reavivado la polémica sobre las condiciones de estas instalaciones, competencia del Ayuntamiento de Almería.

El concejal responsable de las mismas, Carlos Sánchez, quien en la mañana de ayer se personó en la perrera, ha censurado los actos al dar cuenta del ensañamiento de los autores con el perro, que no era un PPP y al que aplastaron la cabeza, y de los daños, también materiales, provocados, como el destrozo de seis chelines (jaulas) y la puerta, reparada en el día de ayer. "Lo que han hecho con ese pobre animal no tiene nombre. El verdadero animal es el que ha hecho esto y lo triste es que tengamos que poner cámaras de vigilancia", lamentó el edil del PP, en referencia a las mejoras en materia de seguridad previstas por el equipo de gobierno en los próximos presupuestos.

Sánchez, quien primero recordó que los muros perimetrales de la perrera fueron elevados y colocadas vallas metálicas para evitar la entrada de intrusos en las instalaciones, detalló la consignación de 90.000 euros a destinar no solo a la ampliación del Centro, sino también a la contratación de un sistema de videovigilancia en el que confía, si bien no descarta que sucesos similares puedan volver a repetirse. "Hasta los bancos con cámaras los roban", agregó el concejal.

Sánchez no fue el único representante municipal que ayer fue a la perrera. También lo hizo Inés Plaza, la concejal socialista que se ocupa de dar seguimiento a la gestión del PP en materia animal. Plaza, en un duro comunicado enviado a los medios de información, además de condenar los hechos, responsabiliza de los mismos al Ayuntamiento: "Se trata de una situación que podría haberse evitado si el alcalde y los concejales del PP hubieran escuchado nuestra alerta en mayo sobre la situación de vulnerabilidad que tiene el centro y nuestra reclamación de que se tomaran medidas. En el Zoosanitario -prosigue la representante de la oposición- ni hay cámaras, ni hay alarma, ni hay ningún sistema de seguridad mínimo".

Desde el PSOE han recordado "que no es la primera vez que se roba en el zoosanitario, aunque en esta ocasión los hechos hayan llegado más lejos que nunca" y que "precisamente por eso, resulta especialmente grave que el PP no haya actuado hasta el momento". De ese modo, Plaza ha rememorado que, a principios de mayo, "tuvo lugar el robo de un perro potencialmente peligroso en ese espacio" y que "ya advertimos entonces de que la historia podría haber llegado más lejos, haciendo daño al resto de perros y gatos que se encontraban allí".

"Las dependencias del zoosanitario acogen a seres vivos que requieren de una protección y de una seguridad mínimas que, como se comprobó entonces y ahora, no se están dando y ese es un problema al que el equipo de gobierno del PP tiene que dar una solución inmediata", ha añadido. A partir de ahí, ha concluido, que "el gobierno municipal no puede seguir cerrando los ojos ante la terrible situación que se está viviendo, de la que es el único responsable".

Pero hay otra cuestión que subyace tras el asalto y es la presencia de un número considerable de perros potencialmente peligrosos, unas presas fáciles para los implicados en peleas ilegales que buscan animales que les sirva en los combates o como pieza para el entrenamiento de otros canes. A raíz de la denuncia del actor Dani Rovira, en El Hormiguero, el equipo de gobierno optó ante la presión mediática por modificar la ordenanza municipal de tenencia de animales, permitiendo que, desde este verano, los perros potencialmente peligrosos pudieran ser adoptados. O dicho de otra manera, que no fueran sacrificados al poco de entrar a estas instalaciones.

Este gesto, bienvenido por todos aquellos que aprecian a los animales, no ha venido de la mano de la pretendida adopción de PPPs. Según la información facilitada por el Ayuntamiento, han sido "muy pocos" los perros de razas potencialmente peligrosas que han sido adoptados desde que entrara en vigor la modificación de la ordenanza, por lo que la presencia de esta tipología de canes se ha multiplicado, pudiendo convertirse en un atractivo para este clase de asaltantes. "Efectivamente, no se está produciendo el número de adopciones que se esperaba", confirma Sánchez, quien admite que "cuanto más tiempo estén los perros en el Zoosanitario, más posibilidades hay que sean observados, además de los posibles interesados, por los cacos".