Rogelio Mena y sus ocho ediles cumplen y gobernarán sin las siglas del PSOE

Más de media docena de policías locales y varias parejas de la guardia civil en la puerta del Ayuntamiento de Albox hacían presagiar lo que finalmente sucedía. Un acto de investidura plagado de reproches y con los dos grupos de la oposición expulsados con la ayuda de las fuerzas de seguridad, tras la orden del alcalde Rogelio Mena. También pedía a la policía que identificase a las madres del conservatorio y las sacara del salón, después de que estas con pancarta en mano le preguntasen "Qué va a pasar con nuestros niños".

Todo ello en un auditorio lleno hasta la bandera, tras el juramento de los concejales y la votación de Rogelio Mena como nuevo alcalde con los nueve votos a favor del Grupo Mixto y ocho en contra, siete del PP y uno de CILUS. Tras la foto del nuevo primer edil con la vara de mando, tomó la palabra el concejal de CILUS, Francisco Torrecillas parafraseando a Don Quijote de la Mancha y las palabras de Don Alonso de Quijano para decir que "hoy, ironía del destino, asistimos todavía conmocionados por el despropósito a la mayor traición al proceso democrático, nunca la mentira y el egoísmo, la soberbia y el rencor, habían aunado sus fuerzas para someter a un pueblo entero a la humillación y el escarnio público. Hoy se ha elegido a un alcalde inhabilitado" dijo Torrecillas.

Con estas palabras introducía las peticiones de CILUS para esta legislatura, "pedimos cauces de comunicación abiertos y no solo ejercicios de marketing, se impone hacer público el resultado de una auditoria externa. En nuestro municipio los servicios son deficitarios… frente a esto tenemos una ciudadanía que soporta una presión fiscal por encima de nuestra comarca". Y hasta aquí llegó su intervención, porque Mena le retiró la palabra.

Intervenía a continuación el portavoz del Grupo Popular, Juan Pedro Pérez, "entiendo que estén satisfechos por la mayoría absoluta del PSOE; mayoría que reconocemos y felicitamos y a la que hoy ya fuera del PSOE ustedes se aferran para elegir a Rogelio Mena como alcalde de Albox. Pero una mayoría absoluta no es un cheque en blanco, ni un pase gratis para eludir los controles del estado de derecho" en referencia a la condena de dos años y medio de inhabilitación del alcalde Rogelio Mena. "Tenga un mínimo de dignidad política y váyase. Cumpla la sentencia del juez, deje que otro compañero suyo sea alcalde. Usted no va a volver a ningún lado, porque usted está políticamente acabado".

Y hasta aquí llegaba la intervención del portavoz del PP porque con la interrupción de Mena, el edil de CILUS le recordaba que estaba condenado. A partir de ahí pedía a la policía local que desalojara del pleno al concejal de CILUS. También lo hacía con Juan Pedro Pérez y todo el grupo popular, y con las madres del conservatorio.

El portavoz del Grupo Mixto, Francisco Carrillo, explicó que daban su apoyo a Mena "por solidaridad con una persona que ha demostrado que ha antepuesto el bienestar de sus ciudadanos y de su pueblo, antes que cualquier otra cosa. Las personas que se la juegan deben ser respetadas y apoyadas" dijo.

El último en intervenir era el propio alcalde, "tengo que pediros perdón porque Albox no merece una oposición como la que tenemos". En cuanto a su condena, Mena aseguró que "hasta que esa sentencia no sea firme, Rogelio Mena seguirá siendo alcalde de los albojenses" y adelantó entre los proyectos de gobierno "el impulso de una nueva estructura comarcal". El nuevo alcalde de Albox advirtió en su discurso de investidura que "este alcalde tiene autoridad ante todo el mundo y como tal, la va a ejercer".