El seminario mayor de San Indalecio peregrina hasta la casa del Cura Valera

Con motivo de la celebración del 200 aniversario del nacimiento del Salvador Valera Parra (1816-1889), popularmente conocido como Cura Valera, hace unos días la comunidad del Seminario Mayor de San Indalecio, junto con sus formadores, las religiosas Misioneras Agustinas Recoletas y algunos amigos cercanos, se desplazaron a la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Huércal-Overa, donde "el siervo de Dios nació y falleció en el ejercicio de su ministerio sacerdotal con fama de santidad". cabe recordar que el Seminario mayor está formado por jóvenes que cursan los estudios de Filosofía y Teología.

Tras el recibimiento el grupo llegado desde la capital pasaron al interior del templo, en el que está enterrado, en concreto, en el presbiterio el benerado y querido párroco. Una vez dentro hicieron una oración junto a los sacerdotes y feligreses de la localidad, donde tuvieron una meditación contemplando las virtudes sacerdotales del "santo" cura Valera. Posteriormente se tuvo el rezo de Vísperas concluyendo el acto cantando el himno que se ha dedicado al ilustre Cura Valera.

Al finalizar, el párroco Francisco Ruiz Fornieles, junto con los miembros de la Asociación Pro-Beatificación Cura Valera, agradecieron a los mimbros del seminario su presencia en los actos que se realizan en el vigente año para conmemorar el nacimiento del "santo" Cura y seguir profundizando en tan alto compendio de virtudes cristianas.

Para ello, obsequiaron al Seminario con un bellísimo cuadro de don Salvador Valera Parra y a todos los asistentes con el libro El Cura Valera y sus cosas, que ha sido escrito por Antonio Jiménez Navarro.