El Santo Cristo de las Penas eleva el fervor de sus fieles

"Allá cuando los años cincuenta, en estas fechas del Santo Cristo de las Penas, venía a Uleila del Campo la Banda de Música Municipal de Almería. A uno de los directores de la Banda le gustó tanto el pueblo que, desde entonces, pasaba sus vacaciones aquí, en Uleila. Este señor era también compositor y una de las marchas que compuso fue el himno al Cristo del Perdón. No sabemos exactamente dónde está la partitura, la escribió aquí y parece que la tienen los hijos que viven en el norte de la provincia, por Macael o por algún sitio de estos".

Esto lo cuenta quien durante años fue alcalde de Uleila del Campo por el PSOE durante ocho años, Juan Ramos Peña. A él le llegó la historia porque la Banda de Música 'Santa Cecilia' de Sorbas le pidió información acerca del paradero del compositor o de la partitura.

Gran conocedor de Uleila del Campo y su historia, Juan Ramos narra que desde siempre, "desde hace cuatrocientos y pico años el Patrón de Uleila del Campo ha sido y es el Santo Cristo de las Penas, aunque no hay nada documentado del por qué, simplemente por la tradición. Este año ha sido el único que se celebra la festividad en su día, el día 14. Siempre es el segundo sábado después del primer domingo de septiembre para hacerlo coincidir con la romería al cerro de la Virgen de la Cabeza".

La procesión del Santo Cristo de las Penas avanza por las calles de Uleila. Detrás, casi todo el pueblo acompaña al Santo Patrón en silencio sólo interrumpido por los sones de la Banda de Música 'Santa Cecilia' de Sorbas y el tronar de la tormenta que a lo lejos se deja ver y oír. Los cohetes se confunden con los truenos. Las nubes abren un claro encima de Uleila del Campo.

Juan Ramos salió de Uleila del Campo para aposentarse en Blanes, un pueblo de la provincia de Gerona. El tirón de la tierra lo trae cada año por estas fechas y "cuando ya no puedo más, me vengo en coche un fin de semana, que son mil setecientos kilómetros". La morriña no es patrimonio exclusivo de los gallegos.

Muchos hijos de Uleila hubieron de emigrar, los más a Cataluña, y el mes de octubre de cada año hacen un encuentro en un pueblo distinto.

Este año, concretamente el día 11 del próximo mes de octubre, la cita es en Igualada, quizá el pueblo donde más uleilenses haya. Se trata de mantener la amistad porque todos se conocían de niños. El próximo año el encuentro será en Uleila. Vendrán todos a la tierra que los vio nacer.

La Fiesta acaba y ya comienza el descanso de las Fiestas. Uleila del Campo vuelve a su vida cotidiana, al silencio de sus calles, al trajín de todos los días tras varias jornadas de jolgorio y alegría.