Segunda jornada sobre costaleros analiza las influencias sevillanas
La organización ha visto superadas las expectativas de participación dada la cualificación de los conferenciantes, el concierto y las convivencias programadas
Antonio Andrés Díaz Cantón, miembro de la comisión coordinadora de las 'Jornadas sobre los 25 años del trabajo a costal en la ciudad de Almería, 1984-2009', no ha dudado en calificar como un rotundo éxito el desarrollo de las jornadas celebradas en el Hotel Elba, organizador de las mismas junto a la asociación Amigos del Costal. Casi 100 personas se inscribieron en las mismas, cifra que se repitió en la segunda jornada que tuvo lugar el pasado sábado, y que trató sobre 'El trabajo del costal sevillano y su expansión andaluza y española como forma de cargar los pasos en nuestras hermandades y cofradías'.
En esta segunda mesa redonda intervinieron Bienvenido Puelles Oliver, costalero del paso de Misterio de San Gonzalo, compositor musical y anterior hermano mayor de San Gonzalo, de Sevilla; Manuel Garduño Lara, capataz de los pasos de San Gonzalo y del Prendimiento, de Sevilla; Miguel Ángel Oliver Zambrano, costalero de los pasos de San Gonzalo y del Desprecio de Herodes, de Sevilla, así como listero del paso sevillano del Prendimiento. Actuará como moderador Ramón Eduardo Pérez Malvido, comisario general del XX Encuentro Nacional de Cofradías.
La primera jornada analizó la evolución del trabajo a costal en Almería durante los últimos 25 años, y contó con la intervención de los capataces del Prendimiento, Carlos Galice, y del paso de palio de la Virgen de Fe y Caridad, Benjamín González; así como los costaleros Juan Javier Úbeda, José Alejandro Suárez, Leopoldo Linares, y Conrado Mohedano, sevillano que calza en la Oración.
A lo largo de la mesa redonda moderada José María Campos, capataz del Cristo de la Buena Muerte y de la Virgen del Mar, se analizaron y debatieron diferentes aspectos que rodean y envuelven el mundo del costal en la religiosidad popular almeriense. Se habló de los diferentes estilos de llevar un paso, la uniformidad de los costaleros y la necesidad de que se den tanto devoción como afición por el costal.
Hay que cuidar las camisetas de los costaleros, afirmó Benjamín González, pero esto no es Sevilla y no es conveniente poner excesivas trabas a quienes desean llevar un paso. En cuanto al protagonismo, "queramos o no, los capataces somos un poco protagonistas, aunque tenemos muy claro que los verdaderos protagonistas son las imágenes titulares que llevamos". Por su parte, Carlos Galice, primer capataz que implantó el costal en Almería, en el paso de la Oración en el Huerto de los Estudiantes, afirmó que es importantísima la máxima comodidad del costalero, "pero esto no es una pasarela de moda, por lo que hay que evitar llamar la atención".
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