Seguridad y control, palabras que definen la labor de la Guardia Civil en el Puerto

Este año ha aumentado un 30% el tránsito de vehículos

Se han dado más casos de polizones por el aumento del tráfico en el muelle

Un guardia haciendo un registro de la mercancía portada por una furgoneta procedente de Marruecos. / Fotografías: Rafael González
Rosa Gallardo

29 de octubre 2017 - 02:32

Ojos asustados y cuerpos deshidratados, eso es lo que ven diariamente los agentes de la Guardia Civil que trabajan en el Puerto de Almería. Debido al aumento del tránsito de viajeros, por el incremento de la oferta naviera, ha crecido también el número de polizones.

Personas que se juegan literalmente la vida en cada viaje. Se esconden en dobles fondos de vehículos, en ruedas de camiones o en habitáculos de motores en el interior de los autobuses; sitios en los que corren un alto riesgo de asfixia.

El tráfico de coches robados ha sido la actuación delictiva más dada en la frontera

La Guardia Civil lleva a cabo múltiples tareas, pero controlar y velar por la seguridad de la frontera son sus principales preocupaciones. El teniente en el Puerto, Eduardo Jesús Fernández Tarifa, explica que investigan, controlan y verificas asuntos tan importantes como "el tráfico de drogas, de personas, los coches robados o la inspección de mercancías ilegales".

Dentro de las principales actuaciones delictivas, la que más ven es el tráfico de coches robados que se intentan llevar al norte de África. Para su detección, cuentan con un personal muy cualificado que realiza un control selectivo de todos los vehículos que embarcan, comprobando en las distintas bases tanto documentación como el número de bastidores y motores.

Además cuentan con el Sistema de Identificación Automático de Matrículas (SIAM) el cual lee la matrícula del vehículo y hacer un cotejo en todas las bases (nacionales e internacionales como la Schengen) e informa si ese vehículo ha sido sustraído o no. Otra manera de actuar, es que desguazan por piezas el vehículo, pero indistintamente los descubren. En estos casos se procede a la detención del individuo y el coche pasaría a disposición judicial.

Como se adelanta al inicio, otro acto muy dado este verano ha sido la tentativa de entrada ilegal al territorio nacional. "Estamos detectando muchos casos en la Operación Paso del Estrecho porque quieren aprovechar el tránsito de pasajeros para colarse", comenta el teniente. Detalla que durante la OPE detectan "el 50% de los inmigrantes irregulares, desde junio hemos hallado 46 polizones".

Para llevar a cabo esta labor de búsqueda cuentan con el servicio cinológico (unidad canina) que están especializados en la búsqueda de personas. Poseen otros perros que están adiestrados en el hallazgo de drogas y otro subtipos que encuentran explosivos. A parte, también cuentan con un detector de latidos del corazón que se conecta al vehículo parado y localiza si hay movimiento en su interior.

Otra tarea cotidiana a la que tienen que hacer frente, es a la supervisión del contrabando de tabaco. La cantidad permitida es un cartón por persona, que es igual a veinte cajetillas. Lo suelen esconder en distintos recovecos o equipajes. Esta infracción pasa a disposición de la aduana del puerto.

Por último, el oficial al mando comenta que el tráfico de drogas "ha bajado un poco aunque sí que se han realizado bastantes aprehensiones ocultas en plataformas de barcos, en individuos y tripulantes que la llevan escondida en el interior de la ropa". Los conductores suelen ser responsables de la carga y pasan a disposición judicial.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último