Senderismo por la costa de los piratas del Cabo de Gata-Níjar

Esta historia se descubre en una ruta que parte en Los Escullos y lleva hasta Cala San Pedro pasando por Las Negras y La Isleta y viajas fortalezas y torres vigías

Senderismo por la costa de los piratas del Cabo de Gata-Níjar
Carolina Crespo Almería

28 de agosto 2013 - 05:01

La costa del parque natural de Cabo de Gata fue siglos atrás el rincón perfecto para el refugio de los piratas. Allá por el siglo XVIII su litoral, marcado por su forma abrupta y salpicado de acantilados en el que aparecen pequeñas calas, servía a los corsarios para esconderse. Revivir estas historias es posible gracias a una ruta de senderismo que descubre al caminante aquellas batallas en alta mar y que tiene como escenarios algunos rincones únicos y sorprendentes del parque Natural de Cabo de Gata-Níjar.

La ruta de los piratas además descubre parte del patrimonio del parque. Torres vigías y fortalezas. En la de los Escullos, en el Castillo de San Felipe (uno de los restos fortificados más importantes y mejor conservados) comienza esta ruta de senderismo, apta para todo tipo de turismo de nivel fácil que discurre por pistas y asfalto.

Durante el recorrido el senderista pasará por lugares de interés como la barriada de Los Escullos, la Torre de los Alumbres, El Playazo de Rodalquilar y batería de San Ramón, la pedanía de Las Negras -bello y pequeño pueblo pesquero- y la Cala San Pedro y la fortificación que comparte nombre.

Tras dejar Los Escullos se llega al cruce de entrada a La Isleta de Moro y se girará a la derecha. En esta aldea se recomienda visitar su espigón, donde podremos disfrutar de un enclave tranquilo y rural en el que todavía pueden observarse las artes tradicionales de la pesca.

Se sale de esta aldea por el mismo camino y se gira a la derecha, dirección a Rodalquilar. Se sube entonces por una sinuosa carretera que permite disfrutar, a la derecha, de calas vírgenes ubicadas entre montañas volcánicas. Al final de esta empinada subida se gira a la derecha por una pequeña pista. Aquí se encuentra el Mirador de La Amatista, punto de información excepcional y desde el que se disfruta de una impresionantes vistas sobre la costa de los Piratas.

El viaje sigue con una bajada pronunciada hacia el valle de Rodalquilar, pueblo que se recomienda visitar por su belleza, tranquilidad y restos mineros. El camino continúa por la vía principal dirección El Playazo, en el segundo cruce a la derecha que se encuentra tras pasar Rodalquilar. Se pasa entonces por una pequeña vía por la Aldeilla de La Ermita, donde hay antiguos caseríos rehabilitados. Aproximadamente a 1,5 kilómetros desde el cruce, se llega a la Torre de las Alumbres.

El camino continúa dirección al Playazo, quedando a izquierda y derecha antiguas norias y construcciones rehabilitadas. Una vez en el parking del playazo se sigue a pie para alcanzar la batería de San Ramón, que vigilaba el litoral comprendido entre Cerrico Romero y La Cala de San Pedro.

Desde este punto se indica el inicio de una ruta que llevará hasta la Cala del Cuervo a través de la costa. Volviendo desde el parking, por el mismo camino, continuará la ruta. En el cruce por el que se entra se toma dirección a la derecha siguiendo por el camino uno se dirige a un nuevo cruce a la derecha, dirección Las Negras.

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