Sigue la música en directo en la sala Chamán de Los Escullos pese a la prohibición municipal
La dirección del local informa que "trabajan en una salida jurídica para que continúen los conciertos"
El Ayuntamiento de Níjar ha intensificado al parecer los controles a los locales de fiesta de la comarca después de recibir una sentencia judicial que le obliga a realizar un mapa de ruidos y después de la petición de los grupos de la oposición a realizar una vigilancia para el cumplimiento de la Ley andaluza de espectáculos. Y ese control ha llegado a la sala Chamán de Los Escullos, a la cual se le ha prohibido realizar conciertos en directo al carecer de licencia para esta actividad.
La prohibición fue recibida por los propietarios de esta conocida sala la tarde en la que actuaba Rozalen, una cantautora manchega que ha sido una de las revelaciones de este año. Ese día efectivos de la policía local de Níjar entregaron un escrito del Ayuntamiento de esa comarca, en el que se prohibía la organización de conciertos basándose en la falta de licencia para esa actividad.
Desde la dirección de este establecimiento ha mandado un comunicado informado que han logrado ponerse en contacto con el Ayuntamiento y "actualmente, se está trabajando en una salida jurídica que pueda dar cobertura a la música en directo en el Chamán. Mientras, la programación de conciertos de esta temporada turística seguirá adelante con la normalidad de todos los veranos".
Han aclarado que "comprendemos que un Ayuntamiento vele por el bienestar de sus vecinos cuando éstos son molestados por algún establecimiento hostelero, pero no ha habido ninguna queja de ningún vecino de los Escullos sobre el Chamán". Además, "la actual licencia de discoteca del establecimiento está a nombre de su propietario y data del año 1988. Dicha licencia es perfectamente válida para la organización de conciertos en muchas comunidades autónomas de nuestro país".
Del mismo modo, dicen que "resulta curioso el modo de operar del Ayuntamiento, el cual conoce las actividades del Chamán desde tiempo inmemorial, y que ahora decida interrumpirlas de la forma más dañina posible: en mitad del verano, con toda la programación contratada.
La dirección de la sala de fiesta también recuerdan que "diez personas residentes en la comarca perderían su puesto de trabajo, aumentando este número a quince personas en el mes de agosto. Eso en cuanto a puestos de trabajo directos". Además, aseguran: "El turismo se vería resentido por la falta de servicio que actualmente ofrece el Chamán. Es cada vez mayor el número de turistas que visitan la costa nijareña para asistir a alguno de los conciertos organizados por el Chamán, de modo que hoteles, bares, restaurantes, terrazas, campings, tiendas, etc, sufrirían este hecho".
"La voluntad del equipo directivo del Chamán es que el actual diálogo con el Ayuntamiento finalice de manera satisfactoria para la comarca de Níjar, el turismo de la provincia y la cultura de Almería", han concluido.
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