Súper fiesta de hinchables, coches y mucho baile

Niños saltando, bailando, con maquillaje e incluso conduciendo. La Caseta Municipal Infantil acogió en la mañana de ayer la Súper fiesta de hinchables, dentro de la que se montó un castillo y un circuito con coches-biciletas, que fueron las actividades favoritas de los más pequeños.

Descalzos disfrutaban saltando en este edificio mientras que los papás y las mamás observaban entusiasmados el espectáculo.

Otros niños, más nerviosos, quisieron probar suerte a colar goles en la portería hinchable, en la que pocos consiguieron marcar aunque no cesaban en el intento. En cuanto a deportes, el mini golf que instalaron por un día en la carpa tenía al menos diez hoyos, en los que los niños iban pasando de uno a otro y colando la pelota. Los pequeños, apenas familiarizados con la actividad, se lo pasaban bien intentando manejar los largos palos, algunos más altos que los propios benjamines.

El tiro con arco fue otra de las novedades, aunque costaba gran esfuerzo. Como si de jóvenes Robin Hood se tratasen, los niños tensaban con fuerza la cuerda y lanzaban la flecha -con ventosa- a una diana colocada a escasos metros. Muchos no sabían cómo se usaba este artilugio, pero para ello estaban los estupendos monitores que siempre ayudan.

"La globoflexia, maquillaje y baile son básicos en la caseta", explicaba Dani, uno de los animadores. Por ello, no podían faltar: mientras que Diego doblaba globos, Sandra hacía maravillas con las ceras de colores, haciendo a los niños payasetes, hadas o malvados piratas.

"Se lleva muy bien todo esto, porque el público es muy agradecido", comentaba Dani. "Los niños siempre te sonríen y se lo pasan bien. Si tienes a los niños contentos, los padres disfrutan". Bailan los clásicos y las canciones favoritas, como Ai se eu te pego o Danza Kuduro.