Teodoro Vives se marcha al cielo que siempre observó

Teodoro Vives ya no mira al cielo. Está en él. Ayer falleció uno de los astrónomos más importantes del siglo XX a nivel nacional. Fue el primer español director del Observatorio Calar Alto (Gérgal) durante un periodo de 21 años, desde el año 1983 hasta el 2003. Bajo su orden y mando, este centro se convirtió en uno de los referentes a nivel europeo, perfeccionó sus técnicas y mejoró sus instalaciones. Él contribuyó a que el observatorio siga aún vivo, a pesar del momento tan difícil por el que pasa en la actualidad. Algo que no le agradaba, algo por lo que sufría.

Bajo su mirada fueron observados planetas, constelaciones, estrellas y nebulosas entre las que ahora querría encontrarse. Ese era su sueño y por ello vivió.

Su última aparición en público fue hace apenas un mes y medio, en la presentación de la Asociación de Amigos del Calar Alto, colectivo del que era presidente de honor. Entonces, dijo lo siguiente, volviendo a demostrar su devoción por el lugar y la profesión al que había dedicado tantas horas, siempre dispuesto a ello: "Es un observatorio privilegiado que tiene muchas raíces. Sirve para continuar la labor de investigación y divulgación que tenía antiguamente. Es un sitio extraordinario donde se pueden disfrutar de las estrellas y del cielo almeriense".

Las muestras de recuerdo y agradecimiento no tardaron en llegar. Lo hicieron por parte de Gérgal, en nombre de su alcalde, Miguel Guijarro, que recuerda a Vives como "una persona cercana" a la que el municipio le debe mucho. "Es una gran pérdida". En 2011, esta localidad de la Comarca del Nacimiento quiso reconocer el trabajo de Teodoro Vives y le dio su nombre a una de sus calles, junto al Centro de Interpretación. Junto al nombre de este ilustre científico que cultivó su experiencia en la provincia de Almería, también rezaba el nombre de otro de los directores del Calar Alto, su colega alemán Kurt Birkle, que lo precedió en el cargo.

La Asociación de Amigos del Calar Alto también quiso dedicarle un último adiós: "La asociación amigos del observatorio astronómico de Calar Alto quiere manifestar su profundo dolor por la muerte de Teodoro Vives, director del centro hispano alemán durante 21 años y mostrar su apoyo a la familia en estos momentos tan difíciles".

Desde la asociación explican que Teodoro ha sido referencia para todos los astrónomos profesionales y aficionados de esta provincia. Su dilatada carrera le llevó por observatorios astronómicos y universidades de todo el mundo. Estuvo en Inglaterra, Brasil o Alemania . Su trabajo le hizo merecedor de la Cruz al Mérito de la República Federal de Alemania. "Su carácter afable y conciliador hizo que en la etapa más cerrada al público, Calar Alto tuviera su espacio entre los almerienses. Almería y la comunidad internacional en general pierde un gran científico no solo por sus conocimientos sino por su calidad humana".

El actual responsable de Calar Alto, José María Quintana, ha querido unirse también a través de este comunicado a las muestras de condolencia.