Trabajadores de Cespa agotan sus últimos 'cartuchos' antes del despido
Si el Sercla previsto para hoy entre Ayuntamiento, concesionaria y trabajadores no lo evita, el próximo lunes se irán a la calle diecinueve empleados de la limpieza
Los trabajadores del servicio de limpieza viaria, edificios públicos y jardinería de Albox tratan de agotar los últimos días que les quedan antes del próximo lunes 15 de octubre, fecha en la que está previsto se rescinda oficialmente el contrato del Ayuntamiento de Albox con la concesionaria Cespa para la que llevan trabajando doce años. La medida, tal y como anunciara en pleno el propio alcalde, José García, supondrá la absorción solo de 12 de los 31 empleados que hasta ahora prestan el servicio en el municipio.
Hoy miércoles está previsto se celebre un Sercla entre las tres partes implicadas, Ayuntamiento, Cespa y trabajadores, quienes esperan que "prime la cordura y estén dispuestos a buscar una solución que evite que diecinueve familias se queden sin un sueldo que en muchos casos es el único que entra en la casa" aseguran.
Por lo pronto ayer martes en el descanso de media mañana y coincidiendo con el mercado semanal, estuvieron repartiendo octavillas entre los vecinos para informarles de lo que va a suceder con este servicio que "hasta ahora por más que digan que les costaba 1,3 millones de euros al año, les salía gratis porque nunca han pagado a la empresa y ahora el servicio de limpieza se resentirá considerablemente porque se encargarán de este servicio muchos menos trabajadores" explica Antonio León, responsable de Comisiones Obreras que acompañaba ayer a estos empleados.
El Sercla previsto para hoy miércoles es una de las últimas oportunidades que tendrán los trabajadores para plantear una solución que evite el despidos. Aseguran que están dispuesto a negociar y que existen varias alternativas que podrían adoptarse para que esto no suceda; "el hecho de que el servicio sea gestionado directamente por el ayuntamiento hará que sea más barato y que entre todos podamos ceder y negociar la prejubilación de algunos de ellos, también tiene cabida un ERE de suspensión de contrato por dos años sin desvincularse definitivamente de la empresa o recolocaciones. Busquemos soluciones, también estamos dispuesto a aceptar una reducción de jornada" explica Antonio León, que ayer se echaba a la calle con los afectados y que tal y como adelantaron desde un primer momento no descartan movilizaciones e incluso llevar a cabo finalmente una huelga.
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