El acusado de provocar un accidente de tráfico en el que murió una mujer de 36 años vecina de Mallorca en la capital almeriense en el 2017, al circular de forma "altamente peligrosa", ha declarado de nuevo este viernes que no había bebido y ha negado que no intentase socorrer a los ocupantes del vehículo contra el que colisionó.

“No niega los hechos. Lo que niega es la omisión del deber del socorro y que estuviese bebido. Simplemente dice que estaba cansado y que había bebido Red Bull”, ha explicado a EFE el abogado Nabil El Meknassi Barnosi, que consiguió que la Audiencia Provincial de Almería ordenase repetir el juicio contra su cliente I.F.B., por “imparcialidad” de la juez.

El Juzgado de lo Penal número 5 de Almería ha acogido este viernes la primera sesión de la nueva vista oral, a cargo de la magistrada Ana María Fernández, del Penal 1, la única prevista inicialmente si bien el juicio continuará el jueves de la próxima semana ya que sólo ha dado tiempo de que declare el acusado, los testigos y el perito de la compañía de seguros del procesado.

El letrado de I.F.B. apunta que dicho perito ha apuntado que, excepto de los cinco ocupantes del turismo accidentado, sólo una niña de 15 meses llevaba el cinturón, y que “si hubiese hecho uso” de dicho elemento de protección “no habrían salido despedidos” el ocupante del asiento trasero, que sufrió heridas graves, y la esposa de éste, que murió.

La letrada de los padres y hermanos de la fallecida, María Dolores García Salcedo, ha confirmado a EFE lo apuntado por el primer letrado, y aclara que el próximo jueves se practicarán las periciales médicas y la correspondiente a la Policía Local.

Ha criticado que I.F.B. haya asegurado que llegó a tomarse “seis Red Bull” para mantenerse despierto y no fuese capaz de ver un semáforo o el coche contra el que impactó, o que incluso se fuese a su casa a acostarse tras el siniestro.

El hombre fue condenado por un delito contra la seguridad vial en concurso con un delito de homicidio por imprudencia grave, tres delitos de lesiones por imprudencia grave y otro delito de omisión del deber de socorro a seis años y seis meses de cárcel y al pago -junto a la compañía aseguradora- de 454.105,56 euros de indemnización a la familia de la víctima.

Aquel fallo, ahora anulado, consideró probado que el inculpado provocó el domingo 8 de enero del 2017 un accidente de tráfico a primera hora de la mañana cuando regresaba de una fiesta en Roquetas de Mar, tras saltarse varios semáforos en rojo a gran velocidad y colisionar con el vehículo en el que viajaba la mujer que resultó fallecida.

La sentencia también indicaba que, tras el siniestro, que además provocó varios heridos de distinta consideración, el hombre abandonó el lugar a pie sin socorrer a las víctimas y fue detenido en su domicilio varias horas después.

De los cinco ocupantes del turismo accidentado, el conductor y la copiloto resultaron heridos leves; un ocupante del asiento trasero sufrió heridas graves y la esposa de éste, que iba también en esta parte del coche, murió a consecuencia del siniestro. La hija de 15 meses de estos últimos, que iba en una silla homologada, resultó ilesa.