Los almerienses encuentran en el autoempleo una salida a la crisis
El número de establecimientos nuevos abiertos en la capital en los tres últimos años supera la cifra de 2.650 · Conforme se ha recrudecido la recesión económica, han ido aumentado las licencias de apertura
Resulta paradójico, pero la apertura de nuevos negocios en la capital ha ido progresivamente en aumento conforme la recesión económica ha pintado cada vez más de negro el panorama de desempleo, según se desprende de los datos que baraja la Gerencia de Urbanismo. Este departamento del Ayuntamiento de Almería, encargado de conceder las licencias de apertura necesarias para la puesta en marcha de tiendas, restaurantes o talleres de reparación de vehículos, por ejemplo, se ha visto sorprendido por un aumento considerable de los permisos en los tres últimos años. Desde 2009, han sido un total de 2.664 nuevos establecimientos los que han abierto sus puertas dentro del término municipal capitalino.
Independientemente de que han sido numerosos los almerienses los que se han visto obligados a echar el cierre a sus negocios, otros tantos han optado por encarar el paro mediante el autoempleo. Es la principal explicación que encuentra Urbanismo a este repunte, protagonizado por la concesión de 819 licencias de apertura en 2009, cifra que superó 2010 con otras 859 licencias y que también rebasó de nuevo el pasado año. La Sección de Licencias cerró 2011 con la aprobación de 986 licencias, situándose incluso por encima de las registradas durante los años de vacas gordas previos a la crisis económica.
La tipología de los establecimientos y empresas creados en la capital en estos tres últimos años es difícil de concretar a través de las licencias, si bien puede decirse que una buena parte corresponde al sector hostelero y tiendas de alimentos. Existen dos clases de permisos de apertura, las inocuas y las calificadas. Estas últimas precisan de un certificado medioambiental y superan a las licencias inocuas, negocios exentos de este requisito como tiendas de ropa o peluquerías, en 2011. Según la Ley 7/2007 GICA (Gestión Integral de Calidad Ambiental), necesitan de los citados certificados las instalaciones energéticas, metales, chatarra, madera, textil, gestión del agua, explotaciones ganaderas y agrícolas, grandes superficies comerciales, supermercados, alimentación, lavanderías, imprentas, artes gráficas, pescaderías, talleres de reparación de vehículos, bares, restaurantes, discotecas o cafeterías, entre otros negocios. Urbanismo concedió, en 2009, 326 licencias calificadas y 493 inocuas; y en 2010, las calificadas fueron 404 mientras que las inocuas, 455.
La relación cambia en 2011, cuando las licencias calificadas superan (530) a las inocuas (456), un dato al que Urbanismo encuentra explicación en el hecho de que los locales de copas se han visto obligados a solicitar una segunda licencia de actividad para la celebración de programas culturales como actuaciones musicales o los en boga monólogos.
La previsión de Urbanismo es mejorar durante 2012 estas cifras, dada las novedades introducidas a finales del pasado año en la ordenanza reguladora de la apertura de establecimientos, con la que el Ayuntamiento "facilita y faculta la puesta en marcha de actividades económicas, mediante la eliminación de trabas y una mayor agilización administrativa", explicaba en su día, el concejal de Urbanismo, Pablo Venzal. Permite iniciar actividades sin previa licencia de apertura desde el mismo día de la presentación de una declaración responsable, sin necesidad de esperar al control municipal. Una agilidad que no ha repercutido de forma sustancial en 2011, ya que su aprobación plenaria corresponde al último trimestre.
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