Una ambulancia de la Cruz Roja vuelca en plena Rambla de Almería
Aún no se ha tomado declaración a los testigos para determinar si el responsable del accidente es el conductor del vehículo de emergencia u otro coche que pasaba
Más de dos horas quedó ayer cerrado al tráfico el cruce entre la Rambla de Almería y la calle Gregorio Marañón, debido a un aparatoso accidente sin víctimas que se saldaba con una ambulancia de Cruz Roja Española cruzada en mitad de la vía. Los hechos ocurrían a primera hora de la tarde, cuando la ambulancia se disponía a recoger un paciente y por el camino se cruzó con un vehículo, marca Opel, con el que se produjo la colisión. "Aún no se conoce en quien recae la responsabilidad", explican los agentes de la Policía Local desplazados hasta el lugar, puesto que "cada uno dice que tenía el semáforo en verde".
De hecho, pese a que el vehículo de urgencia tiene prioridad, siempre debe cerciorarse, en caso de cruzar en rojo, de que cuenta con la vía libre para pasar.
Para determinar cuál de los dos conductores, el del coche de emergencia o del Opel Vectra, se saltó el semáforo será necesario que se interroguen a los testigos que estaban en la zona cuando se produjo el siniestro. Para ello, los agentes se quedaron con los números de contacto que permitan su localización posterior.
No había ningún paciente en el interior del vehículo, se congratulaba el coordinador de Cruz Roja en Almería, Francisco Vicente, presente en el lugar del accidente. Su objetivo en este caso, tranquilizar a los voluntarios implicados y coordinar el papeleo propio de un accidente.
En total, un furgón de la Unidad de Atestados y varios coches patrulla se acercaron al accidente, aunque fueron dos los agentes que velaron por la seguridad, tanto de la circulación como de los viandantes en los alrededores hasta que se produjo la llegada de la grúa y la retirada de la ambulancia, para lo que el encargado necesitó incluso de la ayuda de algún transeúnte para evitar que la grúa se moviera mientras que se arrastraba el vehículo.
La maniobra conllevó una gran presencia de numerosos curiosos, vecinos y paseantes de la tarde de domingo, que estuvieron esperando a que quedara despejada la carretera. La circulación en pleno centro quedó normalizada una vez pasadas las 18.00 horas, cuando se abrió al tráfico el cruce.
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