El antiguo mercado de El Alquián firma su certificado de defunción

El tradicional Mercado de El Alquián ha firmado su certificado de defunción, con la entrada en el Ayuntamiento de Almería de las renuncias de los dos últimos comerciantes que, desde el punto de vista administrativo, mantenían con vida la actividad minorista. Lo cierto es que el edificio cerró sus puertas en abril a la clientela, tras una treintena de años de venta al público.

El equipo de gobierno ha aceptado en una reciente Junta de Gobierno Local las renuncias con las que los dos últimos comerciantes ponen fin a la concesión de los respectivos puestos y las obligaciones contractuales con el Ayuntamiento. La Administración local cuanta ahora con un edificio libre de inquilinos en su totalidad y con un futuro a aclarar, el cual no pretende ser el desuso.

Según ha traslado el concejal de Salud y Consumo, Carlos Sánchez, la idea del equipo de gobierno es reabrir el inmueble en cuanto sea posible, conservando sus actuales funciones como mercado de abastos. El Ayuntamiento quiere volver a sacar a concesión los puestos para lo cual se abordaría durante el próximo año la confección de los pertinentes pliegos de condiciones. Esta intencionalidad avanzada por Sánchez descarta otros posibles usos que el edil de Salud y Consumo llegó a plantear en mayo. El más llamativo era la reconversión del edificio, aprovechando que es diáfano, en una pequeña sala de cines, combinado la idea de terraza de verano con el cine club, ya que el espacio existente tampoco deja mucho margen de maniobra para instalaciones de grandes dimensiones. La otra alternativa era la adaptación del inmueble para su uso como equipamiento social en el que poder dar cabida a las actividades de los colectivos vecinales.

Entre estas tres vías de futuro, la que más concuerda con la opinión del Grupo Municipal Socialista es su reapertura como mercado. Eso sí, llevando a cabo antes una remodelación del mismo. "El equipo de gobierno del Partido Popular no ha movido ni un dedo por este mercado, lo ha dejado languidecer hasta su muerte", reprueba el concejal del PSOE Indalecio Gutiérrez, quien recuerda la historia de este inmueble como valor sentimental añadido. "Antiguamente, las mujeres de los pescadores vendían el pescado en la misma carretera y en la época democrática se hizo este mercado para que pudieran ejercer su actividad de forma regulada y en condiciones óptimas. Esta claro -apostilla el edil- que el PP ni conoce aquello, porque es pequeño para una sala de cine".

Gutiérrez lanza una propuesta sobre la mesa, consistente en dejar la decisión del futuro del inmueble en manos de la propia comunidad vecinal, mediante un reunión conjunta entre las diferentes asociaciones del tejido participativo de El Alquián. Atendiendo a la tasa de paro juvenil que registra este barrio, completa la idea defendida por su Grupo de mantener el mercado, reformado, con cursos de formación dirigidos a los jóvenes, ayudas para recuperar la inversión inicial y la realización de actividades complementarias.