Una asociación gitana denuncia que les vetan la entrada a un chiringuito

La asociación cultural El callí abderitano ha denunciado ante la Guardia Civil al chiringuito Garfield de Adra tras detectar por parte de la asociación que dicho establecimiento no admitía el paso de personas de etnia gitana al local, por lo que se acusa tanto al gerente como a los porteros del chiringuito de un delito de discriminación.

Según la denuncia, el presidente de la asociación, Miguel Heredia, y el portavoz de la misma, Martín Santiago Fernández, indicaron que el pasado 27 de mayo unas personas de etnia gitana les expusieron que tenían "problemas" para entrar al establecimiento.

El gerente del chiringuito, J.A. Romera, asegura que no ha habido tal discriminación en su establecimiento ya que, la noche del 30 de mayo en la que se denunciaron los hechos, "había personas gitanas en el chiringuito", aunque admitió que cobró entrada a "algunas personas" con afán de disuadir su acceso, pues en años anteriores ha tenido "problemas" con ellos.

Romera indicó que está pendiente de la resolución judicial y que él tiene «la conciencia tranquila» después de haber declarado ante el juez el pasado sábado por tales acusaciones. «El año pasado tuvimos algunos problemas con ciertas personas, que además son menores de edad, por lo que se les cobra una entrada alta para impedir que entren», admitió.

De esta manera, Romera señala que esta práctica no se lleva a cabo exclusivamente con personas de etnia gitana, sino con todos aquellos clientes potenciales con los que ya ha habido algún "problema" en otra ocasión. «Ellos se quedan en la puerta y nos acusan de discriminación porque son gitanos», indicó el gerente.