Balón de oxígeno a los quioscos de Almería con nueva ordenanza municipal
El Ayuntamiento amplía el ‘catálogo’ de artículos en venta frente a la caída de la prensa y revistas
El Ayuntamiento baja la persiana definitiva a estos quioscos del Paseo de Almería
El Ayuntamiento de Almería aborda esta misma mañana en Pleno la aprobación inicial de la nueva ordenanza de los quioscos y construcciones modulares en espacios públicos que remoza al sector hasta ahora regido por unas normas municipales que han quedado obsoletas ante una realidad en el que el articulado elaborado pretende contribuir, también, a la supervivencia de los quiosqueros, en peligro de extinción.
Los quioscos han tenido tradicionalmente un fuerte arraigo en la ciudad de Almería como punto de venta de cercanía de productos que, por lo general, han consistido en prensa, libros o revistas, artículos éstos que se han venido complementado con caramelos, frutos secos y otros relacionados. Sin embargo –relata el Ayuntamiento en la exposición de objetivos de la nueva ordenanza–, la situación de los últimos años de este sector demuestra que estos “han sufrido una notable pérdida de su posicionamiento tradicional como referentes habituales en las calles y barrios”, por distintas razones, entre las que cabe destacar, en relación con la prensa, por la bajada de las ventas motivada por la irrupción de la publicación en formato digital.
Productos contemplados en la ordenanza
a) Prensa, libros y revistas en general.
b) Caramelos y frutos secos, snacks, dulces, confites, goma de mascar y similares, todos ellos envasados por establecimientos autorizados, quedando garantizada la imposibilidad de manipulación de su contenido y almacenados en el interior del quiosco.
c) Venta de alimentos prefabricados o reelaborados, o alimentación prefabricada y previamente envasada en los que no medie manipulación.
d) Flores y plantas.
e) Pequeñas artesanías, suvenires, productos de promoción turística de la ciudad de Almería, tales como guías, planos, postales, audioguías y artículos similares.
f) Bebidas, tales como agua y refrescos, debiendo estar provistos de medios de refrigeración, zumos y granizados elaborados mediante máquinas de pequeño volumen, y cafés para llevar preparados mediante máquinas encapsuladoras. Los quioscos que ejerzan esta actividad deberán así mismo cumplir con las especificaciones higiénico sanitarias reguladas en la ordenanza.
g) Venta de tabaco con recargo, a través de máquinas expendedoras, en las condiciones que establece la normativa vigente para este tipo de productos.
h) Helados envasados.
i) Helados artesanales. Los quioscos que ejerzan esta actividad deberán cumplir con las especificaciones higiénico sanitarias.
j) Pequeños consumibles de material telefónico, fotográfico, informático y electrónico tales como pilas, baterías, soportes de grabación digital, tarjetas de memoria, juegos informáticos y electrónicos.
k) Loterías a través de terminales autorizados por la Administración competente.
l) Productos de panadería o bollería, previamente elaborados y envasados, debiendo estar provistos de medios eléctricos de pequeño tamaño que permitan su calentamiento. Los quioscos que ejerzan esta actividad deberán cumplir con las especificaciones higiénicas sanitarias.
m) Hostelería.
n) Fotografía instantánea.
Con esta perspectiva, el Ayuntamiento ha querido actualizar y adaptar la ordenanza municipal de finales de la década de los 90 a las nuevas necesidades y preferencias de la ciudadanía. “Por ello –explican–, este nuevo texto nace con el objetivo, entre otros, de amortiguar, en la medida de lo posible, tales caídas en las ventas, ampliando la gama de productos y servicios que se pueden ofrecer de una manera más extensa, atractiva y acomodada a la realidad actual, conforme a las nuevas necesidades del cliente que requiere de unos mejores servicios, “todo ello respetando las condiciones higiénicosanitarias que sean requeridas, sin olvidar que los quioscos son, probablemente, las instalaciones más accesibles y cercanas a la ciudadanía”.
Mayor agilidad y sanciones desde 300 a 3.000 euros
La nueva ordenanza amplía los productos susceptibles de venta y la prestación de determinados servicios, entre los que figura la recogida de paquetería o incluso, con previa autorización, la transformación en cajeros automáticos. El listado es amplio y la ordenanza afecta también a los quioscos de hostelería, de la ONCE y cabinas fotográficas. Regula los pasos administrativos a dar para obtener autorización, las características y los motivos de cese, “simplificando la regulación municipal e incrementando la seguridad jurídica”. Incluye sanciones que oscilan desde los 300 a los 3.000 euros y está penalizado el cierre continuado durante más de tres meses.
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