Esta calle apesta

El asfixiante calor del sol de julio se mezcla con un repudiante olor a orines que se encuentran incrustados en las aceras de la calle Costa del Sol. Papeles, latas y otro tipo de desperdicios son una muestra de lo que sufren los vecinos de la zona del Zapillo. Ellos lo atribuyen a una deficiente o incluso nula tarea de limpieza por parte del Ayuntamiento.

La situación se ha vuelto insostenible y por ello lo denuncian a los medios para que sus reclamaciones sean oídas. "Esto lleva sin barrer toda la semana", aseguró indignada Carmen Miras. "Las aceras no están tan sucias porque los servicios de limpieza de las comunidades se encargan de fregarlas todos los días", añade.

Carmen Rodríguez, conserje de uno de los bloques afectados fue más contundente: "Esto es una porquería. Pagamos tantos impuestos para nada. Los limpiadores vienen por la mañana, no siempre a diario, cogen dos colillas y papeles y pasan de largo". Carmen se encarga de limpiar diariamente la acera de su edificio y la entrada porque le produce verguënza que vengan turistas a la ciudad y se lleven esta imagen de ella.

Carmen Miras, una de las vecinas más indignadas, aseguró que no ha parado de mandar reclamaciones a la corporativa municipal: "Llevo dos días quejándome de la limpieza, llevo hechas como diez llamadas telefónicas y también envié un correo electrónico al Ayuntamiento. Incluso he escrito un comentario en la cuenta de Facebook de Luis Rogelio Rodríguez, alcalde de la cidad".

Esta zona sufre un cambio con la llegada del período estival y la apertura de las playas y es que crece de forma considerable el número de residentes en las viviendas. La mayoría de los vecinos no ocupan los pisos durante todo el año, sino que una gran parte los tienen como segunda residencia, provenientes de la provincia o de otros lugares como Madrid, Granada o Jaén.

Según las palabras de Carmen Miras estos turistas le han comunicado que ningún año se han encontrado la calle tan sucia como está a día de hoy. Los afectados dan al consistorio una alternativa: "Si hay que aumentar los servicios de limpieza en verano, se aumentan, y más teniendo en cuenta el alto número de parados. Nosotros no tenemos por qué limpiar todo esto".

Otro problema que acusan severamente estos vecinos es el de las palomas. Han tenido que cerrar los portales y las terrazas con mallazos para evitar los excrementos y además porque hacían nidos en el techo de los portales. Éstas junto con los pájaros son conocidas por los residentes de los bloques como "las ratas del aire". "Son un miembro más de la playa, están por todas partes", asegura Carmen Miras.

Rodríguez propone la misma solución que se le dio en Venecia a esto, allí soltaron halcones para eliminar a este tipo de aves.

Las moscas y los mosquitos son una cuestión más a solucionar para los habitantes de la calle Costa del Sol. La tremenda arboleda que tienen justo enfrente de los bloques es el hogar de estos y su altura les ayuda a entrar por las ventanas de los edificios. Los vecinos denuncian que esos árboles llevan más de cinco años sin talarse. "El Ayuntamiento ha emplazado su poda al mes de septiembre", aseguró Miras. "Es posible que los servicios de Aseo Urbano del Ayuntamiento se hayan relajado porque nosotros limpiamos a diario", señaló Carmen Rodríguez.