El blues de la carretera nacional 341, música con billete de ida y vuelta
Crónica del encuentro casual con una mujer cargada de canciones que ella compone Los pasajeros de aquel autobús viajaron por el relato de una vida en primera persona
De vez en cuando la vida coge nuestro paso y saca un conejo de la vieja chistera, de vez en cuando la vida toma conmigo café y está tan bonita que da gusto verla. Fue sin querer..., de vez en cuando el coche va al taller, hay que viajar en el ALSA. Es caprichoso el azar, detuvo el autobús al que subiste tú acompañada de tu hermano. Esta vez tu madre no pudo ampararte, se quedó en casa a la espera de una cirugía de corazón, y como quien ve a la Virgen subir al cielo te ve alejarte camino a tu cita madrileña para una actuación, ella piensa 'la nena vale, la nena estudió teatro, danza moderna y declamación'. Susana Re estudió en la Escuela de Arte de Murcia. Un día, 27 de marzo de 1995, día mundial del Teatro, vio actuar a Mercedes Ferrer, "me dio un vuelco la sangre". Tomó por asalto el escenario del Romea, le pidió permiso a Mercedes "¿puedo cantar una canción?". "Si el público te deja, sí". Y el público la dejó cantar. "Así comencé la andadura por el universo de la música. Después me financié mi primer CD: 'Donde nace el amor' que lo presenté en el mismo teatro Romea junto a Ismael Serrano y Jorge Drexler".
A falta de multinacionales, promociones televisivas y padrinos, comenzó vendiendo sus discos por la huerta murciana, por la costa almeriense, "llamaba a las puertas: soy Susana Re, vendo mi disco que puede escuchar ahora mismo". Colocó 30.000 copias de 'Donde nace el amor', o sea, disco de platino si Susana hubiese sonado en los 40 Principales, "una currante de la música", dice de sí misma. Pasa que "si me quitan la música me muero de pena, de tristeza"; a punto de dejar este mundo estuvo en un accidente, desde entonces nada de coches: no hay trampa ni cartón, soy como veis que soy, vivo en la carretera, dentro de un autobús, vivo en la carretera aparcada en un blues.
El viaje Mojácar-Madrid, con paradas en Vera, Huércal-Overa, Lorca, Murcia y Albacete, se hacía corto. "Siguiendo la carretera veo los rayos pasar, una tormenta se acerca, no sé si va a parar", esta es una de mis canciones canta Susana Re. "Musicalmente hablando le doy al Pop, al Rock, al Folk; me encantan Joaquín Sabina, Bob Dylan, Ben Harper, le doy a todo, soy cantautora y toco la guitarra acústica. He subido a escenarios de Madrid, Barcelona, Granada, Almería, toda España, vamos. Soy como Juan Palomo: grabo y vendo los CD's, soy mi propia agente de contratación". A estas alturas, la línea del cielo de Madrid era una postal desvaída apenas entrevista entre las nieblas de los gases. Cada uno de los viajeros se afanó a lo suyo, a sus prendas de mano, a anunciar a las familias "estamos llegando" a grito pelado desde los móviles. Susana Re y su hermano ansiaban que el autobús parase en la terminal. Les quedaba un camino hasta subir ella al escenario, luego el mismo camino de vuelta en el autobús de las cero horas. Se despide con una frase a modo de martillazo: "dicen que si te pasas toda la vida golpeando una roca, al final se abre un boquete. Y el músico tiene que ser fuerte; un músico fuerte y sensible puede con todo". Uno se aleja en compañía de Sabina, Serrat, Ríos, que han colaborado y mucho en la letra de esta historia, a la que ha puesto música acústica la mismísima Susana Re.
El último trabajo de Susana 'Nada se Detiene' expresa "que por muchas cosas que nos pasen tenemos que ser positivos. Aprender y mejorar". Habla de ecología, de derechos humanos, de igualdad, de soledades, de justicia en todos los lugares del mundo, de amor. Que las musasla acompañen en su camino.
No hay comentarios