LA Casa de los Moral/"Godoyas" es obra de apreciable empaque y plante dentro de la sencillez de su traza. La blanca fachada enlucida, es muy equilibrada en cuanto a la distribución de vanos. Destaca el monumental balcón con hueco encuadrado por bien labradas molduras de cantería de considerable anchura y de apreciable relieve, flanqueado por dos ventanas con rejas rematadas por excelente cruz de hierro, exponente de la sacralización del espacio urbano tan característica del Barroco. La última planta se refleja en la fachada mediante una galería abierta, de arcos de medio punto de ladrillo. Entre los dos centrales existe un escudo de armas, labrado en piedra y muy adornado, timbrado por yelmo y de un solo cuartel con moral de raíces descubiertas, y bordura con seis aspas y ocho flores, armas del Moral. Su monumental portada de cantería, es muy clásica en sus elementos compositivos, pilastras con acanaladura central que incrementa el efecto ornamental, y la saliente y bien moldurada cornisa de base del balcón de hierro. El zaguán da paso al pequeño y encantador patio porticado, en torno al cual gira y se desarrolla toda la vivienda, con las características cuatro columnas, en este caso más finas y estilizadas, que las existentes en otros patios como los de las casas de Fernando Aguilera Campos y la de los Palomar, con las zapatas de madera sobre las cuales se apoyan las vigas, igualmente de madera, como elementos de sostén horizontal.