Cinco cascadas y un géiser de siete metros de altura con juegos de color

La remodelación del entorno de Las Almadrabillas que está llevando a cabo el Ayuntamiento está sólo pendiente de los últimos retoques y comprobaciones para la finalización de esta actuación que aportará una nueva imagen, mucho más vistosa, a esta céntrica zona de la capital. Uno de los atractivos del proyecto es el estanque en forma de estrella con 30 metros cuadrados de cascadas y un géiser con leds de colores, cuyo funcionamiento ha sido objeto de una prueba efectuada en la tarde del miércoles con resultados positivos.

Son cinco las cascadas que conforman el estanque, que tiene un volumen de 100 metros cúbicos y están dispuestas a distintas alturas, de entre 80 centímetros y 1,20 de alto. El chorro del géiser alcanza también diferentes alturas, siendo la máxima de siete metros. Dependerá de la velocidad del viento, para lo cual el sistema cuenta con un anemómetro, según ha explicado el concejal responsable de este proyecto, Manolo Guzmán, quien detalla que la lámina de agua tiene una profundidad máxima de 50 centímetros.

Las pruebas efectuadas comprobaron la eficacia del sistema hidráulico y el funcionamiento del géiser, así como el juego de luces y agua del conjunto con focos de leds de tres colores. Entre los materiales empleados destacan la piedra natural negra, el gres porcelánico, las tiras de césped artificial, chino visto y acero corten.