Los cipreses del camposanto de la capital lucen en todo su esplendor los 365 días del año

Igual que los jardines de la capital son cuidados, limpiados y podados a diario por un grupo de profesionales, los son también los del cementerio de San José. Y de ello se encarga la empresa que gestiona el camposanto de la ciudad, Funespaña, para la cual trabaja un equipo de profesionales que miman todas y cada una de las especies que habitan en el cementerio capitalino.

Sin duda alguna los árboles que más llaman la atención son los cipreses. Uno de los operarios ha detallado que "este tipo se asocia directamente con los cementerios y esto es precisamente porque sus características lo hacen que sea el árbol más adecuado para este tipo de espacios". Entre algunas de sus características, los conocedores de la naturaleza han señalado que debido a su longevidad se ha plantado como símbolo funerario en los cementerios, por lo que se le asocia con frecuencia con la muerte. Asimismo, y debido a los 30 metros de altura que puede llegar a medir, el ciprés es muy utilizado como cortavientos.

Los jardineros de San José, han señalado que esta especies es muy aconsejable ya que además los primeros años no necesita poda, y después puede que tampoco sea necesaria, salvo para curar o recomponer "que es lo que estamos haciendo ahora". En todo caso, la aguanta bien y se debe realizar del otoño a mediados del invierno, en la época vegetativa, para evitar las pérdidas de savia por las heridas. Se puede abonar en otoño o invierno con abono orgánico y en primavera con abono mineral. Cabe destacar que soporta la sequía, el viento, la contaminación así como y el escaso mantenimiento.

Al Ciprés común, Ciprés piramidal, Ciprés italiano o Ciprés de los cementerio lo acompañan otras especies aunque con menores unidades así como explanadas de cesped cuyo mantenimiento es exhaustivo.