¿Dónde están los coches?

Es la pregunta del millón que se hacen muchos peatones, que comprueban con asombro la existencia de calles con parquímetro prácticamente vacías. Fe de ello lo dan vías como Martínez Campos, Antonio Machado, calle Altamira, o la recién estrenada en esto de la zona azul, la Avenida Blas Infante, junto a la majestuosa Ciudad de la Justicia.

Luis Castillo es repartidor de vino. Su trabajo le obliga a recorrer de punta a cabo la capital a diario. "Es tremendo, ha habido una bajada brutal de coches. Te encuentras San Juan Bosco, Hermanos Pinzón, Blas Infante, el centro sin vehículos. La gente se va a los barrios de la periferia a aparcar".

Es una pista para aquel que se encuentre en la situación de no poder dejar el coche en casa. Puede probar primero en el Puerto, en la avenida de Cabo de Gata, en el paseo marítimo, en El Zapillo o en Ciudad Jardín. También otros huecos muy recurridos son las calles del entorno del parking de Gloria Fuertes (junto a la gasolinera de la BP de carretera de Ronda). Mientras este permanece con pocas plazas ocupadas a pesar del lanzamiento de ofertas por parte de la empresa municipal Emisa, los bajos del puente de la avenida del Mediterráneo y los pequeños solares sin uso están repletos desde primera hora de la mañana.

Aunque avanzan, las líneas azules siguen sin conquistar por completo Almería, pero hay nuevas zonas en las que han hecho aparición, lo que ha alterado el modus operandi del aparcamiento. En Nueva Andalucía, por ejemplo, calles como Santiago, Pío Baroja o Blasco Ibáñez son investigadas minuto a minuto por los almerienses, pero si desde antes ha sido difícil aparcar, ahora más.

Los Ángeles, donde el cierre de solares ha complicado la vida del conductor, sin que el 18 de Julio, vallado finalmente por el Consistorio, haya supuesto un alivio para el trajín diario de la búsqueda de una plaza libre y exenta de pago.

Aunque estos refugios del avispado conductor son más complicados de alcanzar. Ya se sabe. A quien madruga, Dios le ayuda. Pero el refrán ya se cumplía antes de la nueva zona azul. Lo que se está poniendo de moda es utilizar los aparcamientos de los centros comerciales, como las plazas subterráneas del Mediterráneo o el estacionamiento en superficie de Carrefour.

De estos oasis del aparcamiento ya bebían los trabajadores del trasladado Palacio de Justicia (con parking subterráneo enfrente), los usuarios de la Policía Nacional o los padres y madres de centros de enseñanza. Lo mismo ocurría con los barrios de la periferia. Si ya se llenaban a primera hora, la pregunta de dónde están los coches sigue en el aire. Teniendo en cuenta que la empresa de transporte público no ha registrado una espectacular subida de pasajeros, solo cabe una respuesta. El almeriense está dejando en su mayoría el coche en casa y se desplaza andando. Un estudio realizado por Tráfico antes de establecerse el ROA ponía de manifiesto que ocho de cada 10 conductores utiliza su vehículo para desplazarse a un lugar donde podría ir andando.