La continuidad de Segura Vizcaíno promete "huir de la mesa camilla"
Se presentó arropado por integrantes 'históricos' del socialismo almeriense
Apoyado por un buen número de militantes y cargos históricos del socialismo almeriense, el que hasta hace poco ejercía como Secretario de Organización del PSOE en la provincia y parlamentario andaluz, Juan Antonio Segura Vizcaíno, ha dado un paso al frente por primera vez en su dilatada carrera política y se ha propugnado como uno de los candidatos a la secretaria general del partido en la provincia. Junto a él se podían encontrar a Cristóbal Fernández, ex alcalde de Carboneras; Antonio Castillo, ex concejal de Almería y uno de los rostros omnipresentes en la Agrupación Local de la capital; el ex alcalde de Huércal Overa, Luis García Collado; el alcalde de Serón y uno de los nombres en boca de todos para capitanear una posible candidatura al Congreso del próximo día 16, José Antonio Lorenzo, la alcaldesa de Uleila y representantes de las agrupaciones de Viator, Roquetas, La Mojonera, El Ejido y Fondón, todos ellos ampliamente derrotados en sus respectivos municipios en las pasadas elecciones municipales.
Con estos mimbres, Segura Vizcaíno quiere conformar una candidatura que dé voz a las agrupaciones locales y que el partido no se convierta en un órgano que determine sus líneas de actuación "alrededor de una mesa camilla".
Entre las pocas novedades a la espera del documento marco que se dará a conocer en los próximos días, está la de reestructurar la agrupación local de la capital almeriense por barrios, lo que supondría imitar a capitales como Málaga o Sevilla que no cuentan con un sólo órgano de decisión, pero que en la práctica sería un retroceso sobre los propios pasos decididos por el PSOE provincial. Del resto, las críticas veladas a la actitud mantenida por el ex secretario general del PSOE, Diego Asensio quien vertió duras acusaciones contra Griñán, señaló Vizcaíno que "jamás se hubieran hecho sin haber sido consultado".
Para quien será su único rival, al menos de los conocidos hasta ahora, mínimas palabras de elogio: "Sánchez Teruel es un magnífico candidato y hace muy bien en presentarse a la secretaría general del partido". Se sirvió de su cintura para no comprometerse en una posible fusión entre ambas candidaturas en los días previos al Congreso en un organigrama en el que él ocuparía la Vicesecretaría general y apenas se salió de la línea blanda de una presentación en la que se escucharon mensajes de libro como "es un proyecto que pretende sumar a todos", que "quiere contar con las agrupaciones locales", que se trata de "un proyecto de futuro" más que una dirección transitoria ante una posible derrota en las elecciones autonómicas del año que viene, que está cargado de "lealtad a las direcciones regional y federal del partido"
Por lo demás, también huyó de "aquellos que dicen que somos el grupo mayoritario" (comentó entre bromas que aspiran a congregar entre el 80% y el 90% de los delegados) y quiso "corregir los fallos de comunicación que hace que el trabajo de la Junta de Andalucía no sea percibido por parte de los ciudadanos", así como "defender la gestión municipal que el PP quiere machacar y eliminar a toda costa incluso en los municipios en los que hemos gobernado hasta hace poco", a la vez que prometió "trabajo tanto de cara a las elecciones autonómicas y generales de año próximo, como para la ponencia política que se va a elaborar en septiembre y en la que esperamos que Almería tenga una voz propia".
A partir de ahora les queda "el trabajo en las agrupaciones locales de cara a conseguir el mayor número de delegados posibles de cara al Congreso; eso es lo que prometemos, trabajo y dedicación; todos me conocen con mis cosas buenas y malas" aseguró el ex miembro de la Ejecutiva Provincial que defendió su derecho a presentarse a una Secretaría General "con el mejor equipo posible entre gente muy válida dentro del partido".
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