Los almerienses comienzan a ir ganando metros sobre la arena y fueron muchos los que ya bajaron a la playa este sábado, en el primer fin de semana de afluencia importante tras la crisis sanitaria derivada de la COVID-19.

Sin masificaciones, pero con mayor presencia de ciudadanos que en días previos, tras la entrada de la provincia en la fase 3 de la desescalada, las playas de la capital almeriense registraron una notable afluencia de personas, siendo para muchas de ellas también la primera vez que tenían contacto con el mar en estos meses.

Muchas de las playas de la provincia cuentan ya con pasarelas de entrada y salida, megafonía o vigilancia por drones para velar por la seguridad, y además se están llevando a cabo exhaustivas tareas de limpieza y medidas de seguridad o de reducción de aforo.

Los municipios costeros de la provincia de Almería están llevando a cabo planes de contingencia con el fin de ofrecer la máxima seguridad en sus playas para evitar posibles contagios de COVID-19.