Tras su detención este lunes por la tarde por matar a su esposa, el hombre de 32 años que ha permanecido bajo custodia en la Comisaría Provincial de Almería será puesto este jueves a disposición judicial. La Policía Nacional lo conducirá a primera hora a la Ciudad de la Justicia para que declare ante el juez, tras lo que previsiblemente ingresará en prisión provisional por un delito aún por definir entre homicidio y asesinato.

Durante estos días, el presunto autor del crimen machista ha tenido la oportunidad de declarar ante los responsables de la investigación, aunque no ha trascendido si lo ha hecho; toda vez que los policías responsables del caso han recopilado las diferentes pruebas y testimonios disponibles para entregar las diligencias instruidas al juez.

Teniendo en cuenta que el crimen se produjo en presencia de sus propios hijos y que éstos alertaron de inmediato a los vecinos, parece difícil que se presente otro panorama diferente al de una petición por parte de la Fiscalía de ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para el arrestado, que será ordenado por el juez casi sin lugar a dudas.

Todo ello por unos hechos que se remontan a las seis menos cuarto de la tarde del lunes, cuando presuntamente el hombre degolló a Zhour, su esposa, acabando de inmediato con la vida de esta joven de 27 años.

Un año antes, este matrimonio de origen marroquí se asentó en la vivienda de la calle Galera de Pescadería en la que se produjo el crimen. Ella estaba embarazada entonces del tercero de sus hijos. Los vecinos no dan crédito. Ambos tenían toda la documentación en regla y él trabajaba recogiendo tomates en invernaderos mientras ella atendía el hogar.

Ambos eran padres de un niño de 9 años, una niña de 8 años y un bebé de seis meses. Muchos vecinos aseguran que era normal ver al progenitor jugar con ellos o pasear al más reciente de sus vástagos por las calles de Pescadería. No se habían producido incidentes previos, por lo que nadie entendía cómo se podía haber convertido en el supuesto autor material de la primera muerte por violencia de género de la provincia almeriense del año.

De acuerdo a la información disponible hasta el momento, el detenido usó un cuchillo de cocina de 10 centímetros para degollar a su mujer en el citado domicilio de la calle Galera.

Los niños alertaron a los vecinos, que dieron aviso a la Policía Nacional. Una vez en el lugar, las dotaciones de policía han reducido al sospechoso tras ofrecer éste una "resistencia moderada".

"En un principio usó a uno de sus propios hijos como escudo", según la Policía que ha destacado que se logró "salvaguardar" la vida del pequeño.

Tras comprobar que la mujer se encontraba sin vida, se activó el protocolo judicial y se ha trasladado a los niños a un centro de menores.

La Policía Nacional aseguró que el agresor carecía de antecedentes y ha añadido que tampoco se encontraba en el sistema de seguimiento integral en los casos de violencia de género, VioGén.

La Delegación del Gobierno en Andalucía señaló que la víctima y el detenido no formaban parte del sistema VioGén y que los datos recopilados ya se han remitido a la Delegación de Gobierno para la Violencia de género para estudiar el caso, tras lo que la muerte de Zhour se ha convertido en el trigésimo tercer caso de España y el décimo de Andalucía con una víctima mortal del machismo.