Inversión en acciones de Recursos Básicos
Denuncian la destrucción de un kilómetro de dunas en Cabo de Gata en Almería
PACMA denuncia la destrucción de más de un kilómetro de dunas en Cabo de Gata y exige la dimisión de la consejera andaluza de Medio Ambiente
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La presión ambiental en Almería vuelve a crecer tras la petición formal de PACMA de que dimita la consejera Catalina García Carrasco, a quien señalan por permitir la destrucción de más de un kilómetro de dunas en pleno Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar. La formación denuncia que maquinaria pesada trabajó este verano en el entorno de la desaladora de Rambla Morales, arrasando cordones dunares a ambos lados del Camino del Charco. El coordinador provincial Eduardo Milla asegura que los trabajos han convertido un paisaje de dunas de hasta dos metros en una explanada con rodaduras, y reclama una revisión profunda de la gestión del litoral en un espacio declarado Reserva de la Biosfera y Geoparque.
La denuncia detalla que las obras vinculadas a la desaladora en Rambla Morales incluyeron el uso de maquinaria pesada que atravesó zonas con vegetación dunar, eliminando estructuras naturales formadas durante más de una década. Según PACMA, la intervención afectó a más de un kilómetro de cordón litoral en una de las áreas más sensibles del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar.
La organización asegura que el paisaje, antes caracterizado por dunas de más de dos metros de altura, ha quedado transformado en una superficie llana con señales visibles del paso de vehículos. Para Eduardo Milla, “atravesar la zona es desolador” y el impacto supone un daño grave sobre el ecosistema.
PACMA subraya que no existe “ninguna justificación” para autorizar maquinaria de este tipo dentro de un espacio protegido. Además, cuestiona que la Junta de Andalucía haya anunciado una futura rehabilitación, afirmando que “esto no se arregla amontonando tierra después”, porque las dunas requieren procesos naturales lentos.
El partido recuerda que estas dunas tardaron más de 15 años en formarse y desempeñan un papel crucial como barrera natural frente al viento, el mar y la erosión. También acogen especies adaptadas a ambientes áridos y salinos, consideradas clave en la biodiversidad del Mediterráneo.
PACMA califica este caso como “el mayor atentado contra las dunas en Almería” desde la eliminación de los sistemas dunares de Mazarrulleque en la década de los 70. Por ello, reclama la dimisión de la consejera y pide responsabilidades políticas y administrativas.
estado y conservación de las dunas
Los sistemas dunares de Cabo de Gata son hábitats de alta fragilidad, donde la vegetación juega un papel fundamental en la fijación de la arena. Colectivos ambientales han advertido en los últimos años del deterioro de vallados y accesos, facilitando la entrada de vehículos y alterando zonas sensibles.
La Junta considera que la gestión del parque exige compatibilizar conservación y actividad económica, pero este caso reabre el debate sobre la suficiencia de los controles y autorizaciones. Las organizaciones reclaman más vigilancia y sanciones frente a usos inadecuados.
Por ahora, la administración andaluza sostiene que rehabilitará la zona una vez concluyan los trabajos, aunque no ha detallado plazos ni recursos técnicos. La falta de concreción preocupa a especialistas en restauración ambiental.
Colectivos ecologistas advierten que la pérdida de dunas reduce la capacidad natural de la costa para protegerse de la erosión, afecta a la fauna local y altera procesos ecológicos esenciales. También recuerdan que este entorno forma parte de una Reserva de la Biosfera.
Turismo sostenible y futuro del litoral
Para PACMA, este episodio debe servir para reforzar la protección del litoral y avanzar hacia un modelo de turismo sostenible que respete los ecosistemas. La provincia de Almería aspira a consolidarse como referente de gestión ambiental responsable.
Entre las medidas planteadas figuran mayor control de accesos, restauración ecológica, campañas educativas y coordinación con ayuntamientos del parque. La formación espera que este caso impulse cambios y eleve el nivel de vigilancia en espacios protegidos.
El conflicto también reabre la reflexión sobre la presión humana en zonas costeras y la necesidad de equilibrar usos públicos y conservación. PACMA sostiene que la administración “no puede fallar” en la defensa del patrimonio natural.
El futuro de esta área de Cabo de Gata-Níjar dependerá de las decisiones políticas y de la capacidad para ejecutar restauraciones efectivas. Las dunas, advierten, son un recurso natural irremplazable cuya recuperación requiere tiempo y rigor científico.
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