Los puntos negros en la nariz son imperfecciones estéticas muy comunes que no presentan graves problemas para la salud, pero que hay que ponerles freno por dos motivos, el primero es la cuestión de la imagen del rostro, más agradable sin estas pequeñas incidencias: y la segunda es para garantizar un mejor estado de la piel.

Estos puntos negros son granos que aparecen en las capas superficiales de la piel. Se denominan blancos o negros en función de su estado. Si el poro que lo forma se obstruye y acaba cerrándose es un punto blanco pero si la parte superior queda abierta, se forma un punto negro.

El nombre de punto negro no es porque la suciedad acumulada en el poro vaya tornando a tonalidades oscuras, sino porque el aceite y la piel muerta que va obstruyendo el poro se oxida en contacto con el aire y se vuelve negro. Por suerte, existen muchos remedios fáciles de aplicar para poner freno a estas imperfecciones.

Mantener una rutina adecuada de cuidados faciales

El cuidado facial comienza con una buena hidratación. El primer paso para conseguirlo es lavar la cara periódicamente, al menos un par de veces al día. No es necesario siquiera usar productos hidratantes o protectores para este paso, pues eso va más adelante.

Solo pasando agua limpia y frotando se puede eliminar la suciedad y parte de la piel muerta. Igualmente es interesante lavar las fundas de las almohadas de manera regular. No obstante, tampoco hay que excederse con esta práctica, pues un exceso de limpieza puede dañar la piel y producir más segregación de aceite y sebo.

Tras el ejercicio también hay que lavarse la cara, porque el sudor puede quedarse atrapado en los poros y acelerar el proceso de oxidación. Y tras aplicar agua y frotar, no olvides secar bien toda la piel.

Tiras de limpieza facial, solución eficiente pero no permanente

Una solución muy popular para hacer frente a estos puntos negros es usar las Tiras de limpieza facial que comercializan muchos laboratorios. Estas tiras no acaban de forma permanente con los poros, pero sí eliminan temporalmente una capa de piel, así como el aceite oxidado y la suciedad que se forma en el punto negro.

Son muy convenientes porque se pueden usar prácticamente en cualquier momento, pero para que su efecto sea mayor es adecuado introducirlas en un procedimiento más completo de higiene facial. Si toca usarlas en plena calle, lo mejor es humedecer la cara de antemano.

En casa, cuando se usan de forma más pausada, lo ideal es acercar la cara a un recipiente con agua hirviendo, con mucha precaución, y dejar que se abran los poros. A continuación, hacer uso de estas tiras de limpieza.

Productos exfoliantes de uso recurrente

Exfoliar la piel es eliminar las células muertas, así que este proceso es muy necesario para ayudar a devolver vitalidad a la piel del rostro, especialmente en la nariz. No obstante, cuando se habla de exfoliación normalmente se piensa en productos ásperos y estos no son los más recomendables para el acné o los puntos muertos.

Por fortuna, en el mercado también podemos encontrar exfoliantes químicos suaves que contribuyen a esa eliminación de las células muertas sin inflamar la piel. Los hay que son liposolubles e hidrosolubles, pero ambos cuentan con un inconveniente, y es que provocan que la piel se muestre más vulnerable frente a los rayos ultravioleta. De este modo, si vas a iniciar un proceso de limpieza facial que incluya estos exfoliantes, no olvides usar protector solar al salir a la calle.

Mascarillas faciales

En el proceso de cuidado de la cara, el uso de una buena Mascarilla Facial también es de gran ayuda. Se pueden elaborar con todo tipo de ingredientes: arcilla, carbón, azufre, aloe vera… Estos componentes presentan propiedades desintoxicantes, limpiadoras, desengrasantes y purificadoras… lo que induce a la eliminación de las células muertas y a la limpieza efectiva de la piel, sobre todo en las zonas más acusadas, como la nariz.

El modo de uso de las mascarillas es sencillo, hay que tener la cara limpia y seca antes de aplicarla, y a partir de ahí, seguir las indicaciones del fabricante para acabar con la retirada y lavarse la cara nuevamente.

Consejos accesorios para un buen cuidado facial

Más allá de usar productos como tiras de limpieza facial o mascarillas, es aconsejable no usar demasiados productos de manera simultánea, aunque estén pensados para eliminar los puntos negros y combatir el acné. El cuidado del rostro es importante, pero no hay que debilitarlo en exceso.

Por otro lado, los intentos manuales para extraer los puntos negros tampoco son convenientes, pues pueden provocar enrojecimiento, irritación y cicatrices permanentes. Esta tarea solo la deben ejecutar profesionales como dermatólogos o esteticistas que cuentan con herramientas desinfectadas y conocimiento suficiente para ello.