Un examinador de Tráfico denuncia a su alumno por increparle tras el suspenso

Trece exámenes se suspenden al día en la provincia de Almería desde que los examinadores de Tráfico iniciaron la huelga el pasado mes de septiembre. Según fuentes de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), desde entonces ya son más de 1.200 los exámenes de conducir se han visto suspendidos y más de 700 los alumnos afectados. El coordinador nacional de CSIF Tráfico, Manuel Santiago, que estuvo ayer en la capital apoyando a los compañeros durante la concentración que llevaron a cabo a las puertas de la sede provincial de la Dirección General de Tráfico, aseguró que "son doce los examinadores que ejercen su profesión en Almería y que ayer participaron en la movilización, cuando hace unos años la plantilla era de 17".

Con pancartas y banderolas, reivindican cambios en la estructura de trabajo para poder comunicar las calificaciones de las pruebas prácticas del permiso de conducir al día siguiente, como se hace con la prueba teórica, o desde un lugar seguro, no directamente al alumno. Denuncian la falta de seguridad que tienen en el ejercicio de su profesión, además de la escasez de la plantilla y exigen retribuciones (suspendidas desde hace diez años) por la peligrosidad que implica estar durante ocho horas en carretera, expuestos a accidentes de tráfico, dentro de un pequeño habitáculo en el interior del vehículo y soportando constantemente insultos, amenazas e incluso agresiones físicas que en algunos casos los alumnos han llevado a cabo con armas.

Precisamente ayer por la mañana, un examinador de la capital sufrió un episodio violento en el que se precisó la intervención de la Policía. Según explicó el propio afectado a Diario de Almería, Carlos García, todo ocurrió al comunicar el suspenso al alumno, momento en el que éste se negó a abandonar el vehículo, opuso gran resistencia y comenzó a insultar.

El examinador ha interpuesto la correspondiente denuncia ante los hechos y, avanzó a este periódico que hace unos años ya fue víctima de amenazas y persecuciones por parte de otro alumno al que denunció y llevó a los tribunales.