Gabriel Amat es un todoterreno de la política. Natural de Albuñol, casado y con dos hijas, el alcalde de Roquetas desde 1999 seguirá al frente del Partido Popular de Almería cuatro años más cuando sea ratificado por la mayoría de los 1.115 compromisarios (algo obvio porque se trata de un candidato único, fruto del consenso) en el Congreso Provincial que tiene lugar hoy y mañana en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Aguadulce. Ni su edad, cumplió 64 años a principios de agosto, ni su gran responsabilidad al frente de uno de los ayuntamientos más pujantes de nuestra provincia le han impedido convertirse en todo un baluarte para el líder del PP andaluz, su hermano mayor y ex ministro Javier Arenas. Son como hermanos, tal y como reconoce el de Olvera cada vez que participan en un acto público, y su amistad ha ido estrechándose con el paso de los años. Amat, de hecho, ha bautizado a unas de las hijas de Arenas y consiguió, además, que fuera candidato a la presidencia de la Junta de Andalucía desde y por Almería, un hito en la historia democrática de la provincia.

Hasta el momento, Gabriel Amat siempre ha salido airoso de sus batallas, ya sean en el terreno electoral e incluso en el judicial, y ha conseguido que el PP sea a día de hoy la principal fuerza política de la provincia, algo así como el epicentro del cambio que quiere aplicar Arenas al resto de Andalucía, porque la gran familia del PP almeriense ha demostrado con creces que ya no es una utopía y sí algo posible. Ya en el último congreso regional, los populares de Almería consiguieron un peso dentro de la Ejecutiva hasta ahora nunca alcanzado y Gabriel Amat fue premiado con la presidencia del Comité Electoral del partido. Y es que es de buen nacidos ser agradecidos y Arenas tiene claro que el PP de Almería ha trabajado como nunca para superar hasta dos escisiones, la de GIAL y la del PAL, y merece ser recompensado por su sacrificio.

Gabriel Amat ha sido el artífice de esa 'salvación' del partido. Es un empresario con una enorme visión de futuro, un sexto sentido, que ha aplicado toda su vida al mundo de los negocios y ahora ha trasladado a la política. El primer edil de Roquetas ha amasado su riqueza de la compra y venta de terrenos y se ha convertido en uno de los mayores empresarios de la provincia. Amat conserva dos hectáreas de invernaderos cerca de la playa que él mismo cultiva cuando tiene tiempo y eso no es muy habitual porque los compromisos del partido han ido creciendo en los últimos años. Su otra pasión es estar con sus nietos y disfrutar de una buena película del Oeste. No ha tenido nunca tres días de vacaciones.