Almería

El horno que ha criado a un pueblo

  • Este establecimiento, de los más antiguos, lleva abierto desde el año 1910 y pertenece a la misma familia huercalense En su interior se cocinan manjares únicos todos los días

Hay aromas que marcan de por vida. Al igual que el olor a libro nuevo que sobrevuela a cada página, a cada nuevo conocimiento. Otras esencias son propias de una determinada etapa o momento. A la infancia le corresponden fragancias por descubrir, gastronomía que conocer y a los adultos, sin embargo, les envuelve el destino.

Olor a tiempo pasado, olor a nuevo o a limpio. Momentos para el recuerdo que quedan ahí, en un aroma que volverá algún día trayendo consigo grandes y pequeños instantes de una vida.

Esto es lo que ocurre cada mañana en un establecimiento de esos de antaño, un local que ha visto pasar el tiempo disfrazado de El Horno, tal y como se le conoce hoy día.

Abrió en el año 1910 en la pequeña y conocida localidad de Huércal- Overa y al fallecer su dueño fueron unos parientes los que se hicieron cargo de ella conservando, además de los ingredientes y recetas de los manjares únicos de la localidad, su esencia.

La panadería llegó a ser conocida por el apellido de su primer propietario, dando nombre al local antes y ahora. La Familia Pastor Pérez y el nombre de Emilio Pastor sigue siendo protagonista cada día cada vez que alguien decide acudir a comprar algunos de sus productos hechos a diario. "Le pusimos el nombre de 'El Horno' por seguir un poco con la idea pero todos la conocen como "El Horno de Emilio Pastor", el padre de un primo hermano mío",cuenta Ana Gómez actual propietaria del local junto a su marido , Juan Antonio Uribe y su compañero Francisco Parra.

"El negocio continuó porque con nosotros trabajaba un chico que no podía llevar todo el trabajo solo", comenta la actual dueña que llena las vitrinas todos los días de productos hechos con cariño y de forma tadicional poniendo como ingrediente esencial un elemento que no aparece en los libros.

El esfuerzo y empeño que ponen a diario es uno de ellos. "Aquí todo es casero, todo natural, no hay impulsores ninguno más que el bicarbonato. No hay almacén, todo es hecho casi a diario, la gente se lleva los productos naturales: manteca, harina o miel", declara Ana Gómez.

El establecimiento está a bierto todo el año aunque existen temporadas como la Semana Santa o la época navideña donde las vitrinas cambian de color. "Durante este tiempo se hacen sobaos y en Navidad destaca la empana de Huércal Overa un producto único de la localidad que se hace con anís seco y va relleno de mazapán.

Se habla de tradición, durante 106 años no se ha movido la receta que han probado casi todas las generaciones del municipio convirtiendo 'El Horno' en uno de los establecimientos más visitados." Mi abuela nació en 1897 y se hacía la empañana con esa receta", confiesa Ana Gómez que se mantiene fiel a los años y al éxito.

El local se ha llenado de maquinaria nueva aunque sus trabajadores confiesan que se necesita unos elementos normales: "Un rodillo eléctrico para hacer la empanada, una amasadora, un nuevo horno y se cambiaron las mesas para amasar que antes eran mesas de mármol".

Los propietarios del establecimiento han sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin dejar de lado el paso de los años. Experiencias que se entremezclan con olores del pasado y que llevan a los que se marcharon a rememorar los días en la localidad huercalense.

"Hay mucha gente de fuera que sigue viniendo expresamente al Horno de Emilio Pastor"para probar los bollos de miel, los rollos de naranja...", dice Ana y se muestra soñadora, como si rememorara cada uno de los momentos que ha pasado tras el mostrador del establecimiento agradeciendo al destino las recetas de hace cien años.

Ejerciendo como máquina del tiempo El Horno abre sus puertas cada día desde las 09:00 horas hasta el mediodía y desde las 17:00 hasta las 21:00 horas.

Magdalenas casera, bambas, sobaos y todo tipo de bollería... están en sus vitrinas cada día. "Se hace a diario, si no hay por la tarde no habrá hasta el día siguente", confiesa la dueña de El Horno de Emilio Pastor y quién sabe si la última.

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